El gobierno mexicano confirmó ayer su plan de apoyo a Pemex de largo plazo con el envío de 3 mil 500 millones de dólares para reestructurar deuda y la reducción de la carga fiscal de 52% a 40%.
El gobierno federal, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), informó que la aportación patrimonial es parte de su estrategia en favor de la “sostenibilidad” de la petrolera mexicana, que tiene como objeto reducir el riesgo de refinanciamiento y el monto de los pasivos, que asciende a 113 mil millones de dólares.
El monto que recibirá Pemex, de aproximadamente 74 mil 340 millones de pesos, equivale a una tercera parte del presupuesto que se pretende destinar a la Secretaría de Bienestar para 2022.
El Gobierno Mexicano anunció que decidió realizar cambios estructurales de manera permanente en Pemex para lograr tres objetivos primordiales: reducir la carga fiscal, la deuda y el riesgo de refinanciamiento de la empresa.
Como parte del plan, la dependencia federal que encabeza Rogelio Ramírez de la O, anunció ayer la operación de recompra y manejo de pasivos enfocado en la parte corta y media de la curva de rendimiento de Pemex.
En dicha operación, detalló Hacienda, Pemex brindará a los tenedores de bonos en dólares, la opción de intercambiar bonos con vencimiento entre 2024 y 2030, por una combinación de un nuevo bono a 10 años y efectivo, además de recomprar los bonos con vencimiento entre 2044 y 2060.
En la estrategia de financiamiento, no se está contemplando refinanciar los vencimientos de 2022 y 2023, ya que se considera asegurar el presupuesto de apoyo a Pemex con las aportaciones patrimoniales necesarias para cubrirlas.
La dependencia federal señaló que dicha operación permitirá reducir el monto de la deuda externa del mercado de Pemex, así como mejorar el perfil de vencimiento de la empresa a través de las amortizaciones de corto y mediano plazo.
Aunado a la reciente estrategia del gobierno federal, Hacienda destacó que intensificará su coordinación con Pemex para mejorar la posición financiera de la petrolera mexicana.
“México cuenta con una posición fiscal sólida y fundamentales macroeconómicos fuertes, por lo que el apoyo a Pemex no compromete la sostenibilidad de las finanzas públicas, ni los recursos para los programas estratégicos y sociales de la presente administración”, plasmaron en el anuncio.
Hacienda señaló que hacia la segunda mitad de la administración, se implementarán mecanismos y estructuras financieras que permitan al Sector Público co-invertir en proyectos de exploración y extracción para asegurar la disponibilidad de una plataforma de producción robusta y que permitan mejorar la estructura de la deuda de la petrolera.
Como medida adicional para fortalecer a Pemex, el gobierno realizó recientemente cambios en la estructura corporativa y dirección de la empresa, encaminados a lograr la consecución de los objetivos planteados, mediante una nueva filial, que concretará todas las actividades de comercialización nacional de Pemex a cargo de Alberto Celazquez Garciam quien fue director corporativo de finanzas de la paraestatal.
Efectos del canje de deuda
Luis Gonzali, codirector de Inversiones en Franklin Templeton, consideró que la inyección de capital que anunció la actual administración, sólo representa una reducción de 3% de la deuda de la empresa productora del Estado.
Además, destacó que este dicho tipo de aportaciones han ocurrido en los dos últimos años, por lo que “es una práctica común”, resultando más destacable únicamente la reducción de los Derechos de Utilidad Compartida (DUC), que se reflejarán en la utilidad bruta en el siguiente año.
El analista añadió que el anuncio que hizo Hacienda manda una señal de que el gobierno extiende su apoyo explícito para la petrolera, sin embargo, se necesitan muchas más acciones para sacar adelante a Pemex.
Por su parte, Ramsés Pech, analista de la industria de energía y economía, comentó que la reestructuración de la deuda sucede en un momento en el que la tendencia de las tasas de interés es alcista y Pemex corre el riesgo de contratar costos más altos, aunque a plazos más largos.
Pech precisó que los 3 mil 500 millones de dólares se irán a capital, que se desconoce la tasa de interés con la que se estarán renegociando las emisiones de deuda en el mercado financieros y que el ahorro por DUC se aplicará en la operación.
En el próximo año, Pemex tiene vencimiento de pasivos por 6 mil 100 millones de dólares.
La SHCP expusó que esta transacción no tiene impacto en el gasto público o en el Presupuesto Egresos, sin embargo, Gonzali aseguró que Pemex le sigue costando al país, ya que “la inyección de dinero deriva de los excedentes del presupuesto”.
Asimismo, destacó que esta operación no impacta de ninguna manera en la nota crediticia de la empresa –que durante el tercer trimestre del año se mostró negativa–, y que faltan muchas acciones para que Pemex pueda volver a tener un grado de inversión.
LEG