Un mes de vida tuvo la Comisión Especial del Senado de la República para determinar la existencia de Abusos de Autoridad y Violaciones al Estado de Derecho en Veracruz, y es que resultó ser más incómoda que las denuncias por acoso y violación en contra de algunos funcionarios y legisladores de la denominada cuarta transformación.
Esta Comisión que en realidad funcionó como un grupo de trabajo, se creó a petición del líder de la mayoría de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, luego de la detención “injustificada” en Veracruz, del secretario técnico de la Junta de Coordinación Política del Senado y brazo derecho del morenista, José Manuel del Río Virgen, en la víspera de Navidad del año pasado.
Desde hace unos meses, Monreal Ávila ha puesto gran empeño y especial preocupación en denunciar los abusos de autoridad y tintes de dictador del gobernador, también morenista de Veracruz, Cuitláhuac García. Denuncias que no le gustaron al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien asegura que el veracruzano es un hombre intachable.
Parece que al Presidente no le han informado que existen al menos un centenar de casos de personas que se encuentran encarceladas bajo argumentos que violan el Estado de Derecho y donde se presume abuso de autoridad.
La Comisión generó incomodidad entre los morenistas, más aún, entre aquellos denominados “ultras” a quienes les interesa más, quedar bien y defender al presidente Andrés Manuel López Obrador que defender a las víctimas de cualquier delito.
Ante ello, la mitad de los senadores de Morena se sublevaron en contra de Monreal por impulsar la Comisión incómoda y amenazaron con hacer una reunión previa a su Plenaria, en la que, si bien oficialmente nunca estuvo en juego su lugar como coordinador, sí existió el riesgo de una posible destitución, lo que a nadie convenía.
Pero no sólo incomodó al Presidente y a los ultras, también el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, reconoció que él no estaba conforme con la creación del grupo para investigar al gobernador Cuitláhuac García incluso, señaló que este grupo beneficiaba más a los intereses de la oposición, que a los intereses políticos de Morena y propiciaba una división al interior del movimiento.
Finalmente, dos días antes de su Plenaria, Ricardo Monreal, prefirió negociar con la oposición ante la falta de respaldo de la mitad de su bancada y solicitó a los coordinadores de todos los partidos políticos, aprobar la desaparición del Grupo especial y, así se hizo.
Monreal Ávila es conocido por ser un buen operador político y supo hasta dónde tirar de la liga y asumiendo que su cargo estaba en riesgo, prefirió dar marcha atrás; otorgando una victoria a los senadores de la denominada ala radical quienes de inmediato se anotaron un punto.
Dentro de Morena hay quienes dicen que Monreal, quien aspira a la presidencia de la República, perdió una batalla, pero también hay quienes dicen que lo importante es ganar la guerra.
Y en Pregunta Sin Ofensa:
Dicen que con los niños no, pero cuando se les ve en un bar abriendo botellas de champaña. ¿Siguen siendo niños?
@aguilarkarina