Con el aval del gobierno federal para que no se aluda a la ilegitimidad, los trabajadores petroleros eligieron a Ricardo Aldana Prieto, como su nuevo dirigente Sindical, hasta diciembre de 2024.
Aldana Prieto pertenece al grupo de control sindical desde la época de Joaquín Hernández Galicia “La Quina” y de Carlos Romero Deschamps, quienes han logrado mantener las mejores prestaciones para los 90 mil trabajadores agremiados a ese Sindicato, algunas como 60 días de aguinaldo, 30 días de vacaciones anuales y después de cumplir 10 años en la empresa, la prima vacacional es equivalente a 207% del salario del trabajador.
Se veía difícil que los miles de trabajadores votaran por un cambio, con el riesgo de perder sus conquistas obtenidas.
De ahí que el gobierno federal decidiera legitimar a través de la Secretaría del Trabajo, la candidatura de Aldana Prieto, quien a pesar de no cumplir los requisitos al ser personal de confianza y/o de base, logró obtener la candidatura y ahora con su triunfo se garantiza la continuidad y el control del sindicato de Pemex, una de las empresas estratégicas para el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Para concretar los proyectos energéticos del gobierno federal es indispensable una buena relación entre los trabajadores y la empresa; de ahí que el primer mandatario decidiera compartir su máxima tribuna mañanera para que los 25 candidatos al Sindicato de Pemex expusieran sus propuestas.
Ricardo Aldana obtuvo casi 45 mil votos, mientras que su principal contrincante César Pecero sólo logró 4 mil 500 sufragios, obteniendo una ventaja que difícilmente se podrá revertir a pesar de las más de 100 denuncias por irregularidades presentadas ante el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral.
Pero además de garantizar una buena relación obrero patronal, Aldana Prieto representa la contuinudad del sindicalismo que tanto ha criticado el presidente, aquel que se ha beneficiado de los trabajadores y que tiene poca transparencia en el manejo de sus finanzas.
El virtual líder petrolero fue tesorero del sindicato durante el liderazgo de La Quina y de Romero Deschamps, fue involucrado en el llamado Pemexgate, pero después fue exonerado. No obstante sobre él existen diversas acusaciones de corrupción y autoritarismo, lo que tampoco le han comprobado.
En la elección todos ganaron: el gobierno mantiene el control de los trabajadores de Pemex, el grupo de Romero Deschamps mantiene las cuotas de 90 mil agremiados y los trabajadores mantienen sus prestaciones. Pero lejos, muy lejos está de terminarse el sindicalismo charro que prometió combatir el primer mandatario.
Y en Pregunta Sin Ofensa:
¿Con cuantos argumentos más tendrá que seguir haciendo malabares el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell para evitar la vacunación contra Covid-19 a menores de 5 a 14 años?