Luego de que 10 personas fueran ejecutadas por un presunto grupo de personas armadas que llegaron a un velorio celebrado en la comunidad de San José de Gracia, perteneciente al municipio de Marcos Castellanos, el alcalde, Jorge Luis Anguiano justificó a las autoridades por tener pocos elementos.
En entrevista con Azucena Uresti, el alcalde del municipio dio declaraciones luego de que las autoridades de Michoacán mencionaron que no recibieron la alerta de la ejecución de las personas. Anguiano mencionó que estos sí se realizaron y que un primer contingente llegó al sitio.
De igual manera compartió que en la localidad solo contaban con pocos elementos. “Los seis policías, al ver la situación regresaron al cuartel y solicitaron más apoyo”.
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Además agregó que esos seis elementos no lograron acordonar la zona.”Seis elementos para una labor tan peligrosa?”.
En medio de la charla, José Luis Anguiano destacó que están dando todas las facilidades para que se lleven a cabo las investigaciones. Agregó que los habitantes de la comunidad están más interesados para estar en “tranquilidad y paz”.
Sobre si conocía a las personas que están señaladas como objetivos del ataque compartió que no conoce a ninguno debido a que al ser un pueblo chico todos se ubican. A las personas que ubicaban eran a la familia del “El Pelón” pero no a él.
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José Luis Anguiano informa que como alcalde no se le ha informado sobre las acciones de las autoridades estatales y que solo hacen rondines sin dar aviso.
Agregó que aunque deberían tener corresponsabilidad institucional no están participando de manera directa.
“No me siento amenazado. Por las declaraciones y cómo se han dado las cosas, si sabemos cuáles son las deficiencias y carencias y que todavía tengamos que estar al frente, tengo el sentimiento de que estamos desnudos”, finalizó.
¿Qué sucedió en Marcos Castellanos?
Al menos 10 personas fueron ejecutadas por un presunto grupo de personas armadas que llegaron a un velorio celebrado en la comunidad de San José de Gracia, perteneciente al municipio de Marcos Castellanos, entre los límites de Michoacán y Jalisco.
A través de redes sociales se distribuyó un video del momento en que los hombres fueron puestas contra la pared de una vivienda, que estarían recibiendo órdenes por parte de lo que sería un comando armado.
La matanza del domingo 27 de febrero en San José de Gracia, Michoacán, fue consecuencia de una venganza entre dos familias, de las que Alejandro El Pelón y Abel El Toro, tenían disputas y conflictos.
LDAV