La medida no será permanente. Chivas quiere contar con sus barras, pero no mientras exista riesgo, luego de las escenas de violencia vistas el fin de semana pasado. Por eso, decidió cerrarles la puerta a los partidos como local, por ahora. Y el presidente del equipo, Amaury Vergara, aclara que no se trata de una expulsión definitiva para los grupos de animación.
“Primero, no es expulsión ni castigo, es un mensaje que queremos mandar de parte de Chivas, de unión, donde ellos también nos van apoyar para hacer este partido como lo hemos solicitado.
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“Creemos que con eso mandaremos un mensaje a todos los demás equipos que se puede colaborar para tener un espacio seguro en nuestros Estadios. Pero repito, no estamos expulsando, no estamos castigando a los grupos de animación, quiero aclarar que en esos grupos de animación hay hay gente que siempre nos ha apoyado, que siempre ha estado con toda la disposición”, explicó este miércoles.
“Nos hemos acercado desde el día de ayer con ellos para explicarles las razones por qué lo estamos haciendo, les hemos pedido su apoyo y hemos tenido una respuesta muy positiva de la mayoría de los líderes de estos grupos de animación.
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“Están muy conscientes, también están dolidos porque por culpa de algunos criminales, porque esa es la palabra, ellos se ven afectados. Vamos a trabajar en colaboración con ellos para asegurar que el estadio de Chivas sea un espacio seguro para todos los que quieren al equipo”, agregó el dueño del club Deportivo Guadalajara.
OH