La ópera en la mirada del reconocido fotógrafo Guillermo Kahlo -sobrino nieto de la pintora Frida Kahlo– se suma a los festejos por los 30 años de la Galería Óscar Román.
Las imágenes buscan plasmar la esencia de los personajes operísticos y transmitirla a quienes las observen, es decir, que se reflejen e identifiquen en ellas.
“Algo que me encanta de los personajes es que nos encarnan de alguna forma, pero también nos dan una identidad”, explicó Khalo.
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El reto es capturar la esencia, acotó: “Yo pensaba, cuando estaba retratando a las personas que participaron como modelos, que desde el principio no queríamos que tuvieran a un actor desempeñando a alguien, sino que realmente la imagen te pudiera convencer de que lo que estás viendo es al personaje”.
La foto debe ser capaz de explicarse por sí misma a través del personaje capturado y debe lograr resignificarse con el paso de las épocas a través de las experiencias del espectador, agregó.
“Primero te tiene que impactar (la obra) y después ya vas cuestionando. Una buena obra, un buen cuadro, un buen libro, una buena fotografía nunca acaba: lo vas viendo a lo largo de tu vida y los vas comprendiendo de diferentes maneras a medida que tú vas cambiando”.
“La ópera es la suma de sensaciones, pero no puede existir esa suma si no hay una esencia y eso es lo que me parece fundamental, que haya un argumento, que es esencial, donde se encarnan los rasgos más profundos de la condición humana”, abundó el fotógrafo respecto a elegir a la ópera como referente.
“Guillermo Kahlo es un artista que ya tenemos tiempo conociendo su obra y es la primera vez que tenemos la oportunidad de tener un proyecto con él y nos hace mucha ilusión”, destacó Óscar Román, director de la galería.
La exposición, conformada por 22 obras, fue inaugurada ayer y permanecerá hasta el 10 de abril en un horario de 11:00 a 19:00 horas. La entrada es gratuita.
LEG