Viajar en avión para muchos es una de las experiencias más gratas o bien más terroríficas según la experiencia de cada persona con las alturas, sin embargo un pasajero contó su “curiosa experiencia” en uno de ellos, esto fue lo que pasó.
El pasajero llamado Mikel Alcázar, quien es un periodista de aviación de origen español, contó su historia a través de su cuenta de Twitter, algo que llamó la atención a los demás usuarios, pues publicó un par de fotografías que desconcertaron a algunos de ellos.
En esta Mikel cuenta que se encontraba de viaje desde México a Madrid, España, abordó un A350 de las aerolíneas Iberia, cuando llegó a su lugar se percató que su ventanilla no tenía persiana.
“No estaba rota ni atascada. Sencillamente, no había nada, La única en todo el avión”, comentó en su publicación.
Luego de esto felicitó a los dos tripulantes que idearon una de las soluciones menos esperada, colocar un poco de aluminio con cinta para tapar aquella ventanilla.
“Con gran creatividad, han preservado nuestro descanso”, agregó.
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😅✈️ Experiencia curiosa. Mi ventanilla del A350 no tenía persiana. No estaba rota ni atascada. Sencillamente, no había nada. La única en todo el avión.
Muy bien por las dos tripulantes de @Iberia que, con gran creatividad, han preservado nuestro descanso. 👏🏻 pic.twitter.com/92P4bSaqNf
— Mikel A. Alcázar (@mikelalcazar) March 31, 2022
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Luego de que su publicación se volviera popular fueron muchos de los usuarios que comenzaron a comentar la publicación luego de haberles llamado la atención la extraña solución al problema.
Algunos de ellos comentaron un tanto preocupados por la situación, tratando de explicar la falta de dicha cortina: “No se en A350 pero el B787 desde el máster panel en galley delantero se pueden prender apagar y bloquear toda bloquear todas las ventas. Por temas de seguridad debería ser a si “.
A lo que Mikel respondió que estas ventanillas del avión eran las tradicionales, no contaban con botones, alguien más le pregunto que si seguro habían sido dos de los tripulantes a lo que comnetó: “Dos, sí. No suelo volar con papel de aluminio, ni con esparadrapo, ciertamente”.
Otros más vieron el lado gracioso del asunto, comentando cosas como: “Te cobran por poner eso” o bien “jajajaja, tu por que sabes de eso… yo te hubiera puesto un toldo con dos tornillicos que no pasen afuera”.
Aunque la mayoría de los comentaristas aplaudieron y rieron de aquella solución tan curiosa para la ventanilla del avión.
SLF