Al informar que sólo 2% del trayecto del Tren Maya tiene pendiente su derecho de vía, el presidente Andrés Manuel López Obrador amagó a quienes quieren “chantajear” a su Gobierno que no se hagan ilusiones, pues podría recurrir a la expropiación.
En su conferencia de prensa, el mandatario pidió a quienes se oponen a las obras, que recapaciten.
“Que como faltan esos pequeños tramos nos van a chantajear y les vamos a dar todo el dinero que piden, que no se hagan ilusiones, porque antes no se recurriría a la expropiación pública, porque para el neoliberal era un sacrilegio poner por delante el interés público, nosotros no, por encima del interés particular está el interés general, el interés público y nos vamos a procedimientos legales”, advirtió.
Incluso, López Obrador reconoció que algunos empresarios empezaron a comprar terrenos cuando se supo sobre la construcción del Tren Maya.
“A unos les falló porque no va a pasar por ahí, otros quieren atracar, robar; no quieren aceptar los avalúos y se amparan porque quieren hacer su agosto. Así no actúa un campesino”, dijo.
Este lunes al acusar que las organizaciones que se oponen a la construcción del Tren Maya están siendo financiadas por el Gobierno de Estados Unidos, López Obrador aseguró que los pobladores cercanos a la obra apoyan la construcción.
La semana pasada la organización Greenpeace protestó contra la construcción y solicitó al jefe del Ejecutivo cancelar el tramo que va de Cancún a Tulum, pues considera que no existe una manifestación de impacto ambiental basada en estudios científicos y se está acabado con la selva.
Aunado a ello, en redes sociales se emprendió una campaña en la que artistas solicitan que se frene la obra, que daña los cenotes y la selva.
LEG