Las acciones de fiscalización no deben concentrarse en un grupo específico de contribuyentes, y se deben evitar procesos basados en arbitrariedad o intimidatorios al extremo de disuadir inversiones futuras, de acuerdo con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
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Al referirse al Plan Maestro del SAT para mejorar la recaudación de grandes contribuyentes, aquellos que declaran ingresos por más de mil 500 millones de pesos al año, el sector empresarial sostuvo que la política recaudatoria debe ser generalizada y equitativa.
“Su concentración en un universo específico de contribuyentes, en este caso las grandes empresas, podría resultar contraproducente”, indicó en un reporte.
La semana pasada el SAT informó que había presentado al sector empresarial su plan para crecer la recaudación de los grandes contribuyentes, conformado por 11 mil 028 organizaciones.
El CCE manifestó que el universo de compañías grandes representa solo el 0.02% del total de poco más de 60 millones de contribuyentes, pero aporta el 50% de toda la recaudación tributaria.
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Destacó además la importancia para el crecimiento y el empleo, ya que según los más recientes resultados de los Censos Económicos, las grandes empresas generaron el 30% del empleo y el 55% del valor agregado.
“Para que la política recaudatoria sea equitativa todo contribuyente debe tener incentivos para contribuir de preferencia sin necesidad de llegar a auditorías o aplicación de medidas coercitivas, aunque desde luego bajo la posibilidad de que las haya. Esta sería la forma de proteger los ingresos públicos recurrentes a futuro”, argumentó.
Apuntó que al incluir al universo restante de empresas que suma 2.3 millones de unidades, las compañías contribuyentes generan casi tres cuartas partes del total de la recaudación tributaria.
Dato
50% de toda la recaudación tributaria lo aportan las grandes empresas
LEG