El Papa: suegras no son el diablo
Foto: AFP | Recibió el Papa un balón de rugby como regalo  

No pasa solo en México, en todo el mundo el papel de la suegra es polémico. Unos la quieren mucho, otros no la pueden ni ver, lo cierto es que ninguna suegra es “el diablo”… y lo dijo nada menos que el Papa Francisco.

El argentino abordó este histórico conflicto ayer miércoles, cuando las defendió, y a las que definió como víctimas de clichés triviales, aunque sí las instó a prestar atención a su lenguaje en la relación con sus nueras.

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Durante su audiencia general en la plaza de San Pedro, dedicada a la relación entre generaciones, el pontífice hizo una larga digresión sobre ese “personaje mítico”.

“Yo no diría que a las suegras se las ve como si fueran el diablo, pero es cierto que se las trata peyorativamente. Pero la suegra es la madre de tu marido y la madre de tu mujer”, expuso el sumo pontífice.

“Decimos que la suegra, cuanto más lejos esté, mejor. Pero no, es madre, es una anciana. Una de las cosas más bonitas para una mujer es tener nietos. Cuando los hijos tienen niños, ella vuelve a vivir”, continuó el Papa, de 85 años.

Jorge Bergoglio también hizo advertencia a las nueras: “Cuiden sus relaciones con sus suegras. A veces son un poco especiales, pero han dado nacimiento a su cónyuge”.

Y finalmente, a las suegras, Francisco les hizo esta advertencia: “Tengan cuidado al expresarse. Las desviaciones del lenguaje son uno de los pecados más feos de las suegras”.

En esta ocasión, el papa pidió perdón por haber presidido la audiencia general sentado, por hallarse muy debilitado por los dolores de rodilla que le obligaron a cancelar recientemente varias citas.

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“Les pido perdón porque los voy a saludar sentado”, dijo al final de la audiencia, “esta rodilla tarda en sanar y no puedo quedarme de pie por mucho tiempo. Me disculpo, gracias”.

Francisco, que en marzo inició su décimo año de pontificado, sufre un dolor agudo en la rodilla derecha, que le ha impedido participar en determinados actos. El Papa dijo al diario argentino La Nación que trataba su dolor con hielo.

Con información de agencias

OH