La Comisión Federal de Electricidad (CFE), justificó que la pérdida neta al 31 de diciembre de 2021 de 106 mil 260 millones de pesos, se debió a la dinámica derivada del Covid-19 y a los frentes fríos.
El Informe Anual 2021 del Consejo de Administración de CFE enviado al Senado de la República, señala que 2021 estuvo determinado todavía por la dinámica derivada de la pandemia de Covid-19, “de tal modo, por segundo año consecutivo, se debieron sortear las dificultades, con un entorno más restrictivo, y con el imperativo simultáneo de preservar la vida y la salud de los trabajadores”.
La CFE explicó que en febrero de 2021, frentes fríos de inusual alcance y extensión, provocaron el congelamiento de instalaciones de transporte de gas natural en Texas, lo que provocó una súbita escasez (“desbalance”) del energético en el sur de los Estados Unidos.
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Por lo que “al ser una fuente primordial de abastecimiento para México, la insuficiencia repercutió de inmediato en la planta industrial del país, especialmente en las centrales de generación termoeléctrica”.
Recordó que en los días de mayor afectación, los precios del gas natural se dispararon hasta más de treinta veces arriba de sus niveles al inicio de 2021 y ante ello, un grupo de plantas privadas decidió dejar de generar electricidad.
“En cambio, la CFE utilizó la capacidad de gestoría de sus filiales CFEnergía y CFE International para negociar en un mercado que se volvió especulativo, obtener el energético para las centrales de generación de electricidad”.
Señaló que además del gas natural, la Comisión puso a operar las plantas de su abanico de tecnologías disponibles, aprovechando el potencial de las hidroeléctricas y las unidades de diésel, carbón, combustóleo y nucleares.
“A diferencia de los generadores privados, que conceptualizan a la electricidad como mercancía, la CFE nunca se planteó como opción dejar de generar electricidad”.
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De esa manera, la CFE dijo que la emergencia fue resultado de factores naturales, pero las consecuencias “volvieron a dejar en evidencia las debilidades introducidas al sector eléctrico mexicano. Qué México se hubiera quedado totalmente sin electricidad, hubiera sido de consecuencias incalculables”.
Aprovechó el Informe enviado al Senado para advertir que “en eventos como éste se refrenda la importancia de que existan garantías para la seguridad y la soberanía energéticas del país. Las empresas privadas, por sí solas, no pueden asegurarlas, porque su objeto natural es el lucro”.
De ahí que para la CFE, el Estado es la única institución capaz de construir las condiciones para brindar un servicio público.
“La lección extraída coincide con el propósito del Gobierno Federal: México necesita una institución pública capaz de garantizar la electricidad, con objetivos sociales prioritarios y y con capacidades suficientes. La emergencia texana dejó claro que la CFE debe continuar el camino de su fortalecimiento”, refirió.
SLF