Hay impulsos y fuerzas naturales.
Las primeras han empezado a sumar apoyos a favor de la ministra Yasmín Esquivel Mossa para suceder a Arturo Zaldívar.
Las segundas son espontáneas.
Y aunque hay varios interesados en presidir el Consejo de la Judicatura y la SCJN, ella lleva cierta delantera.
Uno de sus principales impulsores es Zaldívar, quien perdió con voto propio y de todos sus pares la oportunidad de prolongar dos años su mandato.
Globo de sonda encubierto, descifran los analistas, lanzado desde Palacio Nacional para hacer lo mismo con el titular del Poder Ejecutivo.
Si hubiera prosperado, en lugar de terminar en 2022, Zaldívar continuaría hasta diciembre de 2024 y la primera sesión de 2025 sería para buscarle relevo.
No lo logró y, ante la polémica nacional, el Presidente debió salir a ratificar su compromiso jurado y firmado de no buscar reelección ni ampliación de mandato.
A DOS VOTOS
La fiebre sucesoria sube de temperatura.
No fue igual en enero de 2019 porque los operadores del Gobierno -Julio Scherer, Olga Sánchez Cordero, Alfonso Durazo y gran parte del gabinete- actuaron con cierta discreción.
La búsqueda de apoyos a Arturo Zaldívar comenzó desde octubre de 2018, antes de la toma de posesión presidencial, y culminó con éxito.
Había reservas hacia Zaldívar no por aversión hacia él, sino para evitar el sometimiento del Poder Judicial al Poder Ejecutivo.
Cuando los opositores a esa sujeción se enteraron, la tendencia estaba consumada y de nada sirvió la consigna liderada por el presidente saliente Luis María Aguilar:
-Cualquiera menos Zaldívar.
Hoy los más abiertos en la contienda son la propia Yasmín Esquivel y Javier Laynez Potisek.
Se especula sobre posiciones, pero hay tres ministros cercanos a ella: Zaldívar como operador, Loretta Ortiz -con línea directa a Palacio- y Juan Luis González Alcántara.
Con sus votos, bastarían dos restantes -Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Margarita Ríos-Farjat son los más viables- para hacerla presidenta de la Corte.
La primera en la historia del Poder Judicial.
TERE JIMÉNEZ
1.- Ya surgieron los temores en Aguascalientes.
Según el dirigente panista Marko Cortés, es la única entidad donde el PAN y sus aliados tienen posibilidades de victoria.
La candidata opositora Tere Jiménez inició la campaña con mucha ventaja, muy dinámica y con amplio respaldo de la sociedad.
Pero ha bajado su dinámica.
Su equipo de campaña, como si ésta hubiese terminado, ya se siente ganador y ella no mete orden entre su multitud de generales sin tropa.
Pero faltan más de tres semanas para las votaciones y mientras Jiménez pierde puntos, la oficialista Nora Ruvalcaba recibe refuerzos enviados desde la Ciudad de México.
Por lo menos pueden darle un susto electoral.
Y 2.- Hubo reacciones a lo publicado ayer aquí sobre el apoyo cubano para la aeronavegación mexicana.
-No le llames clases. Tal vez sea muy fuerte… Mejor llámale asistencia de Cuba a México -acota el informante desde La Habana.
A petición suya lo dejamos en “asistencia” pedida por la Agencia Federal de Aviación Civil del general Carlos Antonio Rodríguez Munguía.
LEG