Bajo el argumento de que fue electo por casi dos millones de militantes, el presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno Cárdenas, aseguró que no renunciará a su cargo en el partido, a pesar de que el próximo 5 de junio obtengan un resultado electoral adverso en las seis elecciones donde se renovarán gobernadores.
“Yo fui dirigente electo nacional, como los últimos dirigentes, yo gané las elecciones en un proceso interno, saqué prácticamente dos millones en proceso, fui electo por cuatro años y voy a estar al frente del partido los cuatro años” de tal manera que su dirigencia deberá concluir en agosto de 2023.
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El líder priista rechazó que los comicios del próximo 5 de junio sean un golpe mortal, toda vez que “un partido político no se mide por el número de gubernaturas y representan una fuerza política de 18 por ciento de los votos”.
En conferencia de prensa en el marco de la sesión de la Comisión Permanente, refutó los resultados desfavorables del año pasado y aseguró que su partido creció en votos en comparación de cómo lo recibió en 2019 que fue con el 8% aceptación.
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Al igual que en diputados locales hoy se tienen cerca de 200; en los federales aumentaron a 70 curules; y de 370 alcaldes pasaron a tener 523 actualmente. “El PRI creció aunque no les guste a muchos, 18 puntos sí, quisiéramos tener 40 pero eso ya se acabó, las coaliciones llegaron para quedarse”, advirtió.
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