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Foto: AFP / Elisabeth Borne, presentó ayer su dimisión a Macron después de que el partido en el poder perdiera su mayoría legislativa en las elecciones del domingo, pero el mandatario no la aceptó  

La primera ministra francesa, Elisabeth Borne, presentó ayer su dimisión a Emmanuel Macron después de que el partido en el poder perdiera su mayoría legislativa en las elecciones del domingo, pero el mandatario no la aceptó.

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Según la presidencia francesa, el jefe de Estado desea que el gobierno siga trabajando y actuando, por lo que Borne se mantendrá en el cargo, y reunió a su gobierno este martes en cónclave.

La coalición de Macron ¡Juntos! obtuvo 245 de los 577 escaños de la Asamblea Nacional (cámara baja), es decir le faltan 44 para llegar a la mayoría absoluta.

El frente de izquierdas, llamado Nupes, que reúne a la izquierda radical, ecologistas, comunistas y socialistas, logró 137, y la ultraderechista Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen, 89, cifra que multiplica por once los diputados logrados por esta formación en 2017.

Es habitual que tras las elecciones legislativas el jefe de gobierno ofrezca su dimisión. En general, el presidente la acepta y vuelve a nombrarlo al cargo.

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Sin embargo, este martes, Emmanuel Macron eligió rechazar esta dimisión ritual cuando se presenta ante él una serie de obligaciones internacionales (Consejo Europeo, G7, cumbre de la OTAN) a partir del jueves.

Primero, el Presidente va a llevar a cabo las consultas necesarias con otros partidos de oposición para presentar soluciones constructivas.

Así, Macron, que fue reelegido en abril para una segundo mandato de cinco años, comenzó a recibir a los jefes de los partidos de la oposición. Ya se reunió con el presidente de Los Republicanos (LR, derecha) y el primer secretario del Partido socialista (PS).

La Francia Insumisa (LFI), partido líder del frente de izquierda Nupes liderado por Jean-Luc Mélenchon, prevé depositar una moción de censura contra el gobierno el 5 de julio. Si una mayoría de los diputados la votara -lo que necesitaría un improbable acuerdo entre la izquierda, la derecha y la extrema derecha-, el gobierno de Macron caería.

Francia entra en un periodo de gran inestabilidad política debido a la falta de mayoría absoluta para las tropas de Macron en la Asamblea nacional.

La coalición centrista liberal, que obtuvo en el primer mandato de cinco años una cómoda mayoría absoluta (de 289 diputados) solo conserva 245 escaños, sobre un total de 577, al término de las legislativas del domingo pasado.

Detrás del frente de izquierda Nupes, y de la RN, la derecha clásica de LR, con 61 diputados, puede colocarse en situación de árbitro y por ello el campo presidencial inmediatamente le ha tendido la mano.

Antes de su reunión con Macron, el presidente de LR, Christian Jacob, rechazó cualquier idea de pacto con el gobierno, pues su partido no se convertiría en la rueda de repuesto de la mayoría gubernamental.

CON INFORMACIÓN DE AGENCIAS

FRASES

“La izquierda francesa es plural, está representada en su diversidad en la Asamblea (…) Querer borrar esta diversidad es un error y yo estoy en contra”
Valérie Rabault
Lideresa socialista en el Parlamento

“Hay personas entre los Verdes y el Partido Socialista que todavía están interesadas en trabajar con Macron si pueden tener influencia en las políticas”
Martin Quencez
Experto del German Marshall Fund

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