En redes sociales ha comenzado todo un revuelo bajo el #Justice For Randy Cox después de que se revelara un vídeo donde el hombre de ascendencia afroamericana sufre un fuerte golpe que le rompió el cuello mientras era trasladado en una camioneta de policía.
Randy Cox fue arrestado el pasado 19 de junio por la policía de New Haven por posesión de arma de fuego ilegal. Tras ser inmovilizado de manos y piernas fue colocado en la parte de atrás de la camioneta pero nadie se aseguró que éste viajará en una forma segura para su integridad, ni siquiera le pusieron el cinturón de seguridad.
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Las imágenes de vigilancia del automóvil que han sido compartidas por uno de los elementos de la defensa de la víctima muestran cómo Cox resbaló del asiento al no estar sujeto apropiadamente.
El vídeo captura el momento en que el joven se rompe el cuello cuando la camioneta se detuvo de forma abrupta y repentina haciendo que cayera de cabeza y se golpeara fuertemente.
“Ayuda, ayuda” se escucha decir al joven que ya no pudo mover su cuerpo.
Posteriormente el oficial identificado como Diaz, paró el automóvil para observar lo que había pasado con Randy , quién fue encontrado en la misma posición que cayó.
“¿Qué pasó? ¿te puedes mover?” le preguntó el oficial, ante esto Randy le dijo insistentemente que no. Díaz le aseguró que él no lo movería y llamaría a una ambulancia para que ellos lo hicieran, sin embargo, esto no sucedió.
Al parecer Randy ya había notado la gravedad de la situación por lo que antes de que la situación empeora le pidió al oficial que lo escucharas. “Sí pero entiéndeme, me caí y no puedo mover mis brazos”, dijo.
A partir de este punto todas las veces que el hombre insistió en no poder moverse fueron desestimadas, pues en ese mismo momento Diaz le aseguró que él podía ver cómo su brazo se movía a pesar de que Randy se encontraba tirado en el piso.
La grabación muestra que llamó a su sede pero jamás llamó a la ambulancia.
Cuando Díaz llegó a la sede de la policía varios oficiales llegaron e insistieron a Cox para que se levantara y saliera del lugar o ellos lo harían, “si tienen que arrastrarme, hagan lo que tengan que hacer” dijo resignado a que ellos no creían en él.
Jalándolo de la pierna, los oficiales lo sacaron de la camioneta y a pesar de que notaron que no tenía fuerza para sostenerse por sí mismo le ordenaron sentarse, esto obviamente no sucedió y terminaron colocándolo en una silla de ruedas.
“Es solo que él bebió demasiado”, afirmó una de las policías a pesar de que Randy no podía ni sostener su cabeza.
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Durante su traslado Cox mostraba signos de dolor y con voz débil insistía en que no se podía mover, pero los oficiales alegaban que esto se debía a que él había usado drogas o alcohol.
El hombre fue literalmente arrastrado a una celda y mientras lo ingresaban uno de los oficiales señaló “él está perfectamente bien” para después dejarlo tirado en el piso con los pies esposado y sin atención médica.
Ante esto, el abogado Ben Crump, quien también representó los casos de la familia de George Floyd,Breonna Taylor y Trayvon Martin ya ha compartido sus puntos de vista a través de la red y exige justicia.
“Desestimaron sus súplicas como mentiras. En lugar de ofrecerle ayuda médica inmediata, los oficiales lo sacaron a rastras de la camioneta y lo arrojaron a una silla de ruedas que pudo haber exacerbado sus lesiones potencialmente mortales. Randy fue brutalizado cuando NO había razón para que la policía lo hiciera”, sentencia.
Now, Randy Cox continues to fight for his future. He’s paralyzed from the chest down and has to use a breathing tube – his quality of life is forever diminished. He needs accountability! #JusticeForRandyCox
— Ben Crump (@AttorneyCrump) June 28, 2022
También informó que el joven se encuentra paralizado del pecho hacia abajo, necesita utilizar un tubo para respirar y su “calidad de vida será disminuida para siempre”.
Según los funcionarios del departamento de policía la ambulancia llegó 10 o 15 minutos después de que el joven fuera ingresado a su celda.
Por su parte el alcalde de New Haven, Justin Elicker dijo la semana pasada que después de haber visto varias veces los vídeos “no vio malicia por parte de los oficiales” sino “malas decisiones y una extrema falta de compasión”.
This video is HORRIFIC! Randy Cox was put in a police van without seatbelts and, after an abrupt stop, was thrown into the wall HEAD FIRST. We literally witness his neck break! As he was STILL lying on the van floor, he told the officers that he couldn’t move. What did they do? pic.twitter.com/L9izx7vmDt
— Ben Crump (@AttorneyCrump) June 28, 2022
También aseguró que los 5 oficiales que estuvieron involucrados en el caso han sido puestos en licencia administrativa y por el momento la policía estatal de Connecticut está investigando.
GR