Mientras el terror desatado por la violencia que se vive en Tijuana y Mexicali se apoderó por tercer día consecutivo de los habitantes de Baja California, el presidente, Andrés Manuel López Obrador y el gabinete de Seguridad minimizaron los hechos al asegurar que se trata de “propaganda” con quema de vehículos y otras actividades que no significaron la pérdida de vidas humanas.
POR SI TE LO PERDISTE: No pueden probar que tengo vínculos con el narco: AMLO
Acusó a sus opositores de magnificar las cosas y llamó a la ciudadanía a no dejarse manipular. “Que estén tranquilos, que hay gobernabilidad, hay estabilidad. Y al mismo tiempo hay interés de nuestros adversarios, los conservadores, de magnificar las cosas”.
La madrugada de ayer, siete automotores –camiones, taxis y unidades particulares– fueron incendiados intencionalmente en un lapso de tres horas en el estado fronterizo.
De acuerdo con testigos, los delincuentes arrojaron bombas molotov contra los coches de forma aleatoria; el último a las 4:00 horas de este lunes. El saldo del fin de semana fue de 17 detenidos y 24 unidades quemadas.
Sobre los hechos violentos de la última semana en Chihuahua, Guanajuato, Jalisco y BC, los encargados de la seguridad del país los atribuyeron a una reacción del crimen organizado a los golpes dados a la estructura operativa y financiera de los cárteles del Pacífico, Jalisco Nueva Generación, el de Sinaloa y el de los Arellano Félix.
Durante un informe ofrecido ayer, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, detalló que en Baja California los grupos delincuenciales se disputan las rutas para el trasiego de drogas y “se buscaba intimidar a la sociedad civil creando un sentimiento de inseguridad”.
Ataques, desafío al estado: Rodríguez S.
El director del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), Francisco Rivas, aseguró que México ha vivido años de constante violencia en contra de los ciudadanos, pues no se trata de un ajuste de cuentas entre grupos delictivos. “El presidente López Obrador insiste en negar la inseguridad en el país y miente acerca de resultados en” esta materia.
Detalló a este diario que en 2021, analizaron el desempeño del actual Gobierno en seguridad, pero en todo empeoramos.
Gerardo Rodríguez Sánchez, director académico del Departamento de Relaciones Internacionales y Ciencia Política en la Universidad de las Américas de Puebla (UDLAP), afirmó que con este tipo de hechos violentos el crimen organizado “busca desafiar a los distintos órdenes de Gobierno del Estado mexicano”, aunque se mantiene más poderoso en términos de inteligencia, estado de fuerza, armamento y capacidades.
En una entrevista con 24 HORAS, consideró que se trató de ataques coordinados entre grupos criminales en Jalisco, Guanajuato, Michoacán, Chihuahua y Baja California. “No es casualidad”.
En tanto, la alcaldesa de Tijuana, Montserrat Caballero, de Morena, reiteró su llamado a que los delincuentes a que “arreglen sus cuentas entre ellos”.
Además, respondió al titular de Gobernación, Adán Augusto López, que no la traicionaron los nervios al pedir al narcotráfico que cobre facturas a quienes no pagaron lo que les deben, como dijo él.
“TODOS AL SUELO”, EN CHIHUAHUA
Una balacera en una unidad deportiva de Chihuahua, Chihuahua, quedó registrada en un video que circuló en redes sociales, donde se observa a familias enteras, incluidos niños, tirarse al piso para protegerse. “Está la balacera a todo lo que da, tírense al suelo todos, tírense al piso”, dijo uno de ellos.
El fiscal estatal, Roberto Fierro, negó que se haya tratado de terrorismo urbano.
Detenidos iban contra el CJNG
Los 167 miembros de Pueblos Unidos que fueron detenidos el pasado sábado, en Uruapan, Michoacán, iban a atacar al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), informó el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval.
El grupo se dirigía a Uruapan y San Juan Parangaricutiro y en el camino bloquearon la autopista de El Sol y cinco vialidades más.
El grupo armado iba a bordo de 25 vehículos, en posesión de 176 armas largas, 23 mil 497 cartuchos, dos granadas de fragmentación, tres aditamentos lanzagranadas y más.
Los hombres fueron detenidos con la colaboración de 75 militares, cuatro helicópteros de la Guardia Nacional y 270 elementos de la zona militar de Apatzingán.
LEG