Por representar riesgos “significativos” a la salud, la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), alertó sobre diversos productos engañosos que prometen bajar de peso y se venden como suplementos alimenticios.
“Chupa panza”, “Shupanza”, “Chupapanza”, “Me vale madre 60”, “Me vale madre con melatonina”, “Me vale madre el dolor”, “Me vale madre reforzado”, “Alexjenny me vale madre complejo B” y “Me vale madre reforzado con flor de magnolia”, son algunos de los productos que se venden como malteadas, tés, gotas, cápsulas, tabletas, solución y gel.
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“Estos productos engaño contienen ingredientes no autorizados como suplementos alimenticios, con lo que se incumple la normatividad y legislación sanitaria establecidas en diversos ordenamientos y en la más reciente edición de Farmacopea Herbolaria de los Estados Unidos Mexicanos (FHEUM)”, señaló Cofepris.
Dijo que los productos engaño “Chupa panza”, “Shupanza” y “Chupapanza”, “se publicitan de manera errónea y exagerada al atribuirles propiedades para la reducción de peso, talla, colesterol y triglicéridos. En su etiqueta declaran ingredientes como ginkgo biloba (ginkgo), eucalyptus globulus (eucalipto), cúrcuma longa (cúrcuma), los cuales no deben emplearse para la formulación de suplementos alimenticios”.
Además, dijo que se emplean zingiber officinale (extracto fluido de raíz de jengibre); aloe vera (sábila) y citrus aurantium (naranjo amargo), los cuales contienen propiedades toxicológicas.
“Sumado a estos, también es utilizado en su formulación bamitol, medicamento de uso veterinario indicado en las afecciones inflamatorias en animales”.
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Cofepris señaló que quienes producen y comercializan los artículos denominados “Chupa panza” y “Me vale madre” en sus diferentes variaciones, no han presentado ante la autoridad estudios científicos que demuestren seguridad, calidad y eficacia. Aunado a ello, tampoco se conocen las condiciones sanitarias de las materias primas, el proceso de fabricación y almacenaje.
Por ello, sugirió no consumir, obsequiar ni comprar productos engaño, porque además de ser riesgoso para la salud, afectan la economía familiar. “Quienes comercialicen y publiciten éstos o cualquier otro producto ilegal a través de páginas y plataformas web, redes sociales, tiendas de auto servicio, distribuidores independientes y medios masivos de comunicación, incumplen lo establecido en el Reglamento de la Ley General de Salud, siendo acreedores a diferentes sanciones que esta comisión considere pertinentes”.
KA