La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) abrió una investigación contra quién o quiénes resulten responsables de delitos contra el ambiente por las afectaciones a la playa Balandra, en La Paz, Baja California Sur, luego del derrame de combustible e incendio de la embarcación Fortius el 21 de agosto pasado.
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“La Procuraduría actuará en el ámbito de sus competencias con la imposición de las medidas y sanciones administrativas contempladas en la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente”, detalló.
En tanto, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) informó que fue cerrada la playa también conocida como del Hongo, hasta nuevo aviso, ya que la cantidad de hidrocarburos en el sitio “es considerable”, para que la empresa responsable realice los trabajos de limpieza y se salvaguarde la seguridad de los visitantes.
Restos de aceite, diésel, ceniza y hollín en la superficie de la subzona de uso restringido Balandra B, además de basura y partes quemadas del yate hundido fue lo que detectaron elementos de la Secretaría de Marina (Semar), la Profepa, la Capitanía del Puerto y la Conanp, con apoyo de Red de Observadores Ciudadanos (ROC), en un recorrido a la zona.
“La Conanp solicita la intervención inmediata de la empresa responsable del accidente para realizar acciones de monitoreo de la calidad del agua y de la zona federal marítimo terrestre, así como de cualquier acción que asegure la conservación de los ecosistemas de esta Área Natural Protegida”, detalló en un comunicado.
LEG