Durante la presente administración, la Ciudad de México se ha posicionado como una de las ciudades con mayor compromiso sustentable ante los retos ambientales existentes del siglo XXI, coinciden expertos.
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Y es que en medio de una crisis de agua, energía y residuos, en el marco del Cambio Climático, la CDMX ha invertido en recolectores de agua de lluvia en la zona sur, paneles solares en la Central de Abasto (Ceda) y edificios gubernamentales y plantas de reciclaje de residuos.
Para la arquitecta Alicia Silva, representante de México en la Mesa del Comité Internacional de Análisis de LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental, por sus siglas en inglés) y directora y fundadora de Revitaliza Consultores, refirió que la sustentabilidad es una necesidad ante los retos climáticos.
“La parte más pobre de la ciudad tiene peor calidad del aire, cuando los que contaminan son los que tienen los carros y las fábricas que están en la parte más rica de la ciudad, entonces, la sustentabilidad también tiene que ver con una equidad social”, destacó Silva.
Además, la también miembro del Consejo Consultivo de The Green Expo, precisó que un reto es que las nuevas edificaciones se construyan o modifiquen con miras a la sustentabilidad en materia de agua, residuos y calidad del aire.
Por ejemplo, en la Central de Abasto de la Ciudad de México, en la alcaldía Iztapalapa, se construye una Planta Solar Fotovoltaica con una inversión de 400 millones de pesos; es decir, los techos de la Ceda se están llenando de paneles solares para volverla sustentable energéticamente.
Pero este interés en la energía solar no solo es gubernamental, pues consumidores privados también aprovechan sus techos para captar la energía solar.
Guillermo Flores, CEO de First Energy SA de CV, una empresa de energía solar con base en la Ciudad de México, comentó que cada vez más gente está interesada en adquirir paneles solares, no solo debido al ahorro en los recibos de luz, sino por un tema de sustentabilidad y autoconsumo energético.
“Notamos que en los últimos tres años el interés en la energía solar por parte de los consumidores cada vez es mayor, no solo por los reducir costos de la luz, sino por todas las toneladas de CO2 que se dejan de emitir para que todos tengamos un aire más limpio”, destacó el especialista.
LEG