“El traspaso de la Guardia Nacional (GN) a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) es un retroceso para la seguridad pública basada en los derechos humanos”, así se pronunció la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos.
Este 9 de septiembre el Senado de la República aprobó, en lo general y particular, la incorporación de la GN a la Sedena.
La iniciativa se aprobó con 69 votos a favor y esto otorga a la Sedena el control administrativo y operativo de la GN.
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Sin embargo, Nada Al-Nashif, Alta Comisionada interina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, expresó su preocupación por está decisión así como algunas críticas.
Dentro de las críticas está que en la reforma aprobada hay una nula presencia de supervisión de una autoridad civil en la Sedena y pidió que se refuerce este aspecto.
“Las reformas dejan a México sin una fuerza policial civil a nivel federal, consolidando aún más el ya prominente papel de las Fuerzas Armadas en la seguridad pública en México. Hago un llamado a las autoridades mexicanas para que refuercen la supervisión civil en el sector de la seguridad, en consonancia con las normas de derechos humanos”, dijo Al-Nashif.
La Alta comisionada añadió que hubo pocos debates públicos previos para determinar la aprobación de la iniciativa
Añadió que desde 2006 ha ido en aumento la presencia de Fuerzas Armadas en la seguridad pública del país y esto no ha significado una disminución en criminalidad.
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Además dijo que las denuncias de violaciones a los derechos humanos de parte de las fuerzas de seguridad han aumentado.
Al-Nashif dijo no estar en contra del uso de las Fuerzas Armadas pero deben ser implementadas como un último recurso y en eventos extraordinarios bajo la supervisión de un órgano civil.
“Los mecanismos de derechos humanos han señalado claramente que las Fuerzas Armadas sólo deben intervenir en la seguridad pública de forma temporal, en circunstancias excepcionales, como último recurso, y siempre bajo la supervisión efectiva de órganos civiles independientes”.
“Es preocupante que las reformas aprobadas no incluyan ninguna disposición que garantice la supervisión civil de la Secretaría de la Defensa Nacional, lo que plantea preocupaciones adicionales en materia de #DDHH, incluso sobre la rendición de cuentas”, dijo Al-Nashif.
— ONU-DH México (@ONUDHmexico) September 9, 2022
LEO