La alta inflación provocada por la pandemia, conflictos bélicos en el mundo y motivos internos de cada país hizo que la población reenfocara su consumo para seguir comiendo saludablemente sin afectar al bolsillo.
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Derivado de la contingencia por Covid-19, los mexicanos comenzaron a tener una vida más saludable, teniendo mayor actividad física y pensando mejor los productos que consumen; pues del 39.6% de la población en México que dijo ser activa físicamente, 73.9% señaló como motivo principal el cuidado de la salud, de acuerdo con datos del INEGI.
Algunos de los productos que aumentaron su consumo durante la pandemia fueron los alimentos frescos como frutas y vegetales y los congelados, pues estos últimos permiten guardarlos más tiempo.
Sin embargo, debido a la inflación, los precios comenzaron a incrementarse, “una preocupación que creció mucho fue la parte financiera porque los consumidores tienen presupuestos limitados, entonces reenfocaron un poco su gasto y empezaron a limitarlo, hacia productos más básicos”, explicó Christine Lopes, miembro del consejo consultivo de The Food Tech, evento de la industria de alimentos y bebidas donde se exponen las tendencias y problemáticas del sector.
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Uno de los conflictos que impactó directamente en los alimentos saludables fue “la guerra de Ucrania y Rusia que impactó mucho en el mercado de cereales y de ahí a muchos insumos para varias categorías del mercado de alimentos y bebidas”,
Lopes señaló que ante el alza de precios los consumidores optan por productos más básicos como frutas y verduras de consumo local, pues de esta manera se economiza el valor de la transportación del producto, además de que ayuda a crecer al comercio del lugar.
En este sentido, señaló que además del consumo local, otras prácticas que pueden apoyar los consumidores que tengan una dieta saludable es buscar iniciativas que prioricen el valor nutrimental por encima de la estética de los productos y así colaborar con erradicar el desperdicio de alimentos, “productos que ya no se ven tan bonitos como los podemos encontrar en el súper, pero son naturales y frescos a veces a menores costos, es algo que viene muy fuerte porque también tenemos que cuidar el planeta”.
GR