Debido a las que personas privadas de la libertad en el país no reúnen las condiciones mínimas de salubridad, no pueden ser consideradas potenciales donadoras de órganos, tejidos y células, determinó el Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra).
En respuesta a un punto de acuerdo aprobado por la Comisión Permanente en el que se pide implementar un programa de donación voluntaria de órganos y tejidos de personas privadas de la libertad e informar de dicho programa, el director del Cenatra, José Salvador Aburto Morales enumeró las condiciones de salud que imperan en los reclusorios.
Por si te lo perdiste: Confirman mil 968 casos de viruela símica en México
“Se presentan considerables deficiencias en la prestación del servicio médico, de cuidado e higiene, alimentación, etc., lo cual puede derivar en un problema de salud pública, trayendo como consecuencia que al no ser atendidas de manera oportuna las enfermedades de los internos por no contar con medicamentos suficientes.
“Las actividades de promoción para la salud se realizan esporádicamente y el que prácticamente no existan programas de prevención de padecimientos infecto-contagiosos y de detección oportuna de enfermedades crónico degenerativas, así como un nulo tratamiento de adicciones, es que este Centro Nacional de Trasplantes considera que los reclusos no reúnen las condiciones mínimas de salubridad para ser considerados potenciales donadores de órganos, tejidos y células”, detalló el funcionario en la información enviada al Poder Legislativo.
Por si te lo perdiste: Enciende Lily Téllez discusión en el Senado sobre las Fuerzas Armadas
En la misiva resaltó que con la finalidad de mejorar la salud de los receptores de órganos, tejidos o células es indispensable que “todo aquel potencial donador goce de buena salud, encontrándose en plenas facultades físicas y mentales, así como no contar con enfermedades que representen un riesgo sanitario para la salud del receptor.
En la Cámara de Diputados está pendiente de discutirse una minuta del Senado para reformar la Ley General de Salud con la cual todo ciudadano mayor de 18 años se convertirá en potencial donador de órganos, a menos que expresamente lo rechace.
LDAV