En México, siete de cada 10 personas que trabajan, no ganan lo suficiente para sostener a una familia de cuatro integrantes, según estimaciones de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
Cerca de 35.58 millones de trabajadores mexicanos, equivalente al 71% del personal ocupado, perciben ingresos inferiores a lo que se necesitaría para adquirir dos canastas básicas de cuatro mil 158.53 pesos cada una, esenciales para cubrir las necesidades más básicas de cuatro personas.
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Pero los bajos salarios, no sólo se atribuyen a cuestiones de informalidad o empleabilidad en micronegocios, sino también a los bajos salarios que ofrecen en las medianas y grandes empresas, pese a que en sus estados financieros reportan vastos niveles de utilidad, expuso Rogelio Gómez Hermosillo, coordinador de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
En la presentación del reporte del Observatorio de Trabajo Digno de la organización, apuntó que desde años se ha fomentado la creación de empleo, sin embargo no se ha priorizado la parte cualitativa, pues grandes empresas, como las departamentales o del sector financiero, ofrecen salarios cercanos a los seis mil pesos mensuales a trabajadores de la base operativa, ingresos insuficientes para adquirir dos canastas básicas indispensables para superar el umbral de la pobreza.
En ese sentido, refirió que el artículo 123 constitucional específica que los salarios deben de ser suficientes para satisfacer las necesidades de una familia.
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Asimismo, añadió que el artículo 23 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos expone que los trabajadores deben de tener una remuneración equitativa y satisfactoria que le permita, junto a su familia, una existencia conforme a la dignidad humana.
“Quien trabaja, no debería de ser pobre”, sentenció al proponer que las empresas deberían de pagar, por lo menos, ocho mil 500 pesos para que los trabajadores tengan la oportunidad de adquirir dos canastas básicas.
RM