El presidente Andrés Manuel López Obrador calificó como un “fracaso” el hackeo del grupo Guacamaya a los archivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y evitó que el titular de dicha dependencia respondiera los cuestionamientos de la prensa.
Ayer en conferencia de prensa desde Tamaulipas, el titular del Ejecutivo negó ahondar sobre el hackeo sufrido y explicar sobre la negativa del titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval, para comparecer al respecto ante la Cámara de Senadores: “Que se busquen otro asunto”, exhortó.
Además, el mandatario impidió que el titular de la Sedena tomara la tribuna ante el cuestionamiento de una reportera sobre si la información revelada por el hackeo fue a parar a los fiscales de los estados, y el mismo Presidente respondió.
“Quisieran que les ayudáramos a hacer el caldo gordo tratando el tema (del hackeo masivo), que fue un rotundo fracaso. Salió porque. (…) Si van a echar escándalo, que tenga sustento”, dijo y se negó a que el general hablara con los medios de comunicación.
También el presidente López Obrador calificó el hackeo a la Sedena como un fracasado intento de “politiquería” por parte de sus opositores para desestimar la imagen de su Gobierno.
Sobre esta reacción del primer mandatario, la senadora del PAN, Xóchitl Gálvez, escribió en su cuenta de Twitter que en ningún lugar se le puede cuestionar a Luis Crescencio Sandoval.
“Ahora resulta que a los titulares de las Fuerzas Armadas no se les puede preguntar ni en el Senado, ni en la Cámara de Diputados, ni en las conferencias mañaneras. El Presidente no quiere que se hable del hackeo más grande de la historia al Ejército”.
A finales de septiembre un grupo de activistas denominados Guacamaya obtuvo miles de documentos confidenciales obtenidos de los archivos de la Defensa Nacional. Desde entonces, el Ejército mexicano se ha mantenido en la opinión pública por las irregularidades reveladas.
Entre los casos que destacan fueron desde que militares estaban en la nómina de Los Zetas que exportan huachicol desde Dos Bocas a Arabia Saudita hasta los vínculos del secretario de Gobernación con líderes huachicoleros, entre otros.
LEG