Especialistas en economía del sector privado consultados por Banxico durante octubre mejoraron sus pronósticos de crecimiento para la economía mexicana en 2022, pero deterioraron sus previsiones de inflación.
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La mediana de los analistas anticipó que el PIB crezca 2.10% en 2022, desde el 2% previsto en la consulta mensual anterior. La mejora para el desempeño de la economía ya suma tres meses consecutivos con ajustes al alza.
Sin embargo, las proyecciones aún quedan por debajo de la previsión puntual de 2.4% del Gobierno federal.
Para 2023, la proyección de crecimiento bajó de 1.20% a 1.0%, hilando cinco meses seguidos en los que los analistas reducen la estimación, alejándose todavía más del pronóstico puntual de Hacienda de 3%.
Sobre la inflación, las estimaciones se mostraron adversas para los cierres de 2022 y 2023, ya que aumentaron respecto a septiembre.
Para el cierre de 2022, los analistas anticipan que la inflación general alcance el 8.50% anual, desde el 8.44% previsto en la consulta anterior. El alza en el pronóstico suma 15 meses con incrementos.
El estimado para la inflación subyacente pasó de 8.08% a 8.50%, acumulando 11 meses de deterioro para el indicador que determina la trayectoria de la inflación general en el mediano y largo plazo.
Para el cierre de 2023, la mediana de los 38 grupos de análisis prevé una tasa de 5.09%, desde el 4.76% del mes anterior. Se sumaron tres meses con ajustes al alza.
Las proyecciones distan de las del Gobierno, que espera una inflación general de 7.7% anual para el cierre 2022, y de 3.2% para el de 2023.
Hasta la primera quincena de octubre, la inflación general se ubicó en 8.53% anual, y la subyacente en 8.39%, según Inegi.
El pronóstico para la tasa de interés de referencia de Banxico al cierre de 2022 aumentó de 10.25% a 10.50%, y para 2023 pasó de 9.75% a 10.25%.
La tasa del banco central se ubica en 9.25%, tras el más reciente anuncio de política monetaria del 29 de septiembre, cuando la Junta de Gobierno decidió por unanimidad incrementar 75 puntos base.
Por otro lado, los analistas prevén un dólar menos caro para los cierres de este y el próximo año. Para el cierre de 2022 se estima que la divisa estadounidense se venda en 20.40 pesos y no en 20.62, y para 2023 el pronóstico pasó de 21.38 pesos hasta 21.03 pesos.
Con ello, las expectativas sobre el tipo de cambio estarían en línea con los 20.40 pesos por dólar que planteó Hacienda para 2022, y marginalmente por debajo de los 20.60 pesos para 2023.
Las proyecciones contrastan con el reporte de Moody’s Analytics que hace unos días advirtió que para finales de 2022, a lo largo de 2023 o inclusive hasta 2024, el peso sufrirá una “inminente” depreciación de alrededor del 20% frente al dólar, como parte de las consecuencias del apretamiento de la política monetaria de Estados Unidos.
Sobre los grandes factores que pueden obstaculizar el crecimiento en los próximos seis meses, los analistas destacaron la gobernanza, las condiciones externas y las condiciones económicas internas.
En particular señalaron problemas de inseguridad pública, presiones inflacionarias en el país, así como la debilidad del mercado externo y la economía mundial.
LEG