Tras una visita, encabezada por la titular de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, Marina Robles, prevén que el ahuehuete de Reforma responda de manera favorable entre finales de febrero y finales de marzo del próximo año.
“Como lo hemos estado haciendo, venimos a revisar las condiciones del ahuehuete y a tener una opinión más de los ingenieros que han estado monitoreando, revisando y atendiendo al ahuehuete junto con nuestros técnicos para poder darle las mejores condiciones a este árbol y para poder darle tiempo de que se convierta en un árbol hermoso para la Ciudad de México”, señaló Robles.
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Por su parte, Adrián Cavazos Cavazos, experto en producción de ahuehuetes y propietario de Viveros Nacionales, zona productiva de Montemorelos, Nuevo León, donde se produjo este ahuehuete, indicó que es normal el proceso de adaptación del árbol de 20 años, pues es una especie caducifolia.
“Los sabinos, como se les conoce en el norte, son caducifolios, esto significa que tienen la capacidad de tirar el follaje o desvestirse; es una protección del Taxodium mucronatum que resintió estrés físico y entró en dormancia (estado de reposo), pero nos va a brotar”, afirmó el experto.
Tras el incidente del pasado 7 de junio en el que un vehículo impactó uno de los tensores que sujeta al ahuehuete y por la compactación del suelo provocada por la presencia de visitantes que se han acercado demasiado al árbol, fue que autoridades y expertos determinaron delimitar un perímetro alrededor de la rotonda, a fin de propiciar la mejor adaptación del ejemplar arbóreo, el cual, debido a estos incidentes, se ha visto expuesto a un alto estrés desde su plantación.
Otras medidas que se han implementado son la aplicación de fungicidas y fertilizantes orgánicos, a fin de fomentar la adaptación y desarrollo del árbol, así como el fortalecimiento de sus raíces.
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Ante la aplicación de estos cuidados, Cavazos prevé que el brote del follaje se dé en febrero o marzo del próximo año, agregando que la humedad, la temperatura ambiental, la presión barométrica y la temperatura del suelo favorezcan al ahuehuete:
“Esos cuatros factores son primordiales para que nuestro Taxodium mucronatum, nuestro ahuehuete, brote y eso puede ser, según las tablas que hemos revisado con los ingenieros de aquí, finales de febrero hasta finales de marzo. No podemos dar una fecha exacta ni la cantidad de brotación que va a ser, si va a ser en todas sus ramas y en cada una, eso va a estar en monitoreo”, subrayó Cavazos.
EAM