América arrancó de manera intensa el partido de vuelta ante Guadalajara, para colocarse al frente en el marcador, con tan solo cuatro minutos de acción, por la vía penal y con la definición de Andrea Pareira.
A pesar de los esfuerzos realizados por las Chivas, se encontraron a un conjunto Azulcrema mejor posicionado y que mayores respuestas encontraron al ataque, ante la necesidad de sus rivales de proponer el partido y jugar un futbol arriesgado.
Chivas, en su intento por reaccionar de manera inmediata, lograron que se les concediera una pena máxima al minuto 10 del primer tiempo, que fue revertida por el VAR, instantes después.
Las Águilas estuvieron más cerca de incrementar la ventaja, con una acción de Katty Martínez que se estrelló en el poste de las rojiblancas.
Para la segunda mitad, las capitalinas pegaron de nuevo mediante Alison González, quien a los 62 minutos marcó el segundo tanto, que silenciaba más el Estadio Akron y dejaba con desconcierto a los fanáticos de la Perla Tapatía.
Sin embargo, Adriana Iturbide levantó la mano por parte del Rebaño y recortó distancias cinco minutos más tarde, con lo que cambió el ánimo de sus compañeras y la afición.
El momento fue de menos a más, y al 81’ Gabriela Valenzuela empató el marcador para regresar la esperanza a su equipo, que con el tiempo encima buscó con determinación un milagro.
Las plegarias parecieron ser escuchadas, pues al minuto 85, Chivas consiguió un penal que Alicia Cervantes cobró con actitud y puso el boleto a la final a un solo gol.
Cuando parecía que todo estaba dado para que el Guadalajara Femenil lograra la hazaña, apareció Kiana Palacios al 90+2’ para sepultar las aspiraciones rojiblancas y concretar el pase de las azulcremas a la final, donde se medirán ante Tigres, equipo que eliminó a las Rayadas y luchará por el título.
LEG