A pesar de asegurar que está en la mejor disposición de acudir al Senado de la República a comparecer, la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra, advirtió que el mes de noviembre no le será posible “toda vez que para lo que resta del mes tengo una agenda comprometida con la atención de víctimas”.
La defensora de los Derechos Humanos en el país dijo ser “una profunda convencida del diálogo, de la rendición de cuentas y de la construcción de rutas de trabajo en común, y es un hecho que en la defensa del pueblo tenemos que caminar juntos, más allá de partidos y de agendas coyunturales”.
Por ello, pidió al presidente de la Mesa Directiva, Alejandro Armenta, “acordar con toda anticipación las fechas, formato y modalidades que oportunamente se propongan para llevar a cabo la comparecencia, toda vez que para lo que resta del mes tengo una agenda comprometida con la atención de víctimas, tenemos prevista la celebración de un Congreso fuera de la ciudad, en fin, actividades que como comprende, requieren que conciliemos agenda”, explicó.
De esa manera, Piedra Ibarra pidió entender que su agenda “no es asunto menor por tratarse de la funcionalidad del organismo constitucional autónomo defensor de los derechos humanos de nuestro país, le envío un cordial saludo, reiterándome a sus órdenes”.
Al respecto, el coordinador de los senadores de Movimiento Ciudadano (MC), Clemente Castañeda declaró que la titular de la CNDH, ha tenido un comportamiento deplorable, “no nos extrañe ya absolutamente nada, ella es una empleada más del Presidente de la República y tiene un profundo menosprecio por su propia actividad. Si ella no se da su lugar cómo espera que se lo den el resto de las instituciones”.
De esa manera, reprobó que los llamados a cuentas no sean atendidos, “ella es responsable ante el Senado de la República y tiene que hacerse cargo de sus decisiones”.
LEG