Cuando muere una mujer y el caso se hace mediático, las autoridades investigan de inmediato y potencian esfuerzos, como con la muerte de Debanhi Escobar en Nuevo León, en abril de 2022, al igual que el de Ariadna en la CDMX, en octubre pasado, coincidieron las especialistas consultadas… Pero otros que pasan desapercibidos para el público, como el de Laura Bazaldúa, no han avanzado.
En entrevista con 24 HORAS, su hermano José aseguró que su hermana fue asesinada por su expareja, quien tiene conocidos en la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), la entidad con más feminicidios en 2022, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
José detalló que la última vez que vio a su hermana fue cuando salió de viaje a Malinalco, junto a su pareja, y luego su cuerpo fue encontrado en la zona del Estado de México.
Sostuvo que a la fecha la FGJEM no ha hecho justicia, pues el culpable no ha sido detenido.
“La Fiscalía no ha actuado en todo este tiempo, nos dicen que están avanzando, pero de ahí no avanza, por desgracia el caso de mi hermana no fue mediático, porque si no en dos semanas se hubiera resuelto”, acusó José.
Además, aseguró que el posible implicado presume de tener “contactos” al interior de la Fiscalía estatal.
Los feminicidios en México mantienen una tendencia a la alza desde 2015, mientras que el homicidio doloso contra mujeres presenta cifras más altas, pero ha disminuido desde el 2019.
De acuerdo con datos del SESNSP, en 2015 se registraron 412 feminicidios; en 2016, 607; en 2017, 742; en 2018, 898; en 2019, 942; 2020 cerró con 946; 2021 con 978, y 2022, al corte de septiembre, registra 695 delitos de este tipo.
En este año, el Estado de México ha sido la entidad con más feminicidios, con 101, seguido de Nuevo León, con 79; Veracruz, con 55; Ciudad de México, con 52; y Chiapas y Oaxaca, con 32 registros cada uno.
Por su parte, el homicidio doloso contra la mujer en 2019 registró dos mil 875 eventos; en 2020, dos mil 875; en 2021, dos mil 746, y en lo que va de 2022, al corte de septiembre, existen dos mil 136 registros.
Guanajuato es el estado que lidera la lista en 2022 con 300 delitos de este tipo, le sigue Baja California, con 214, y Michoacán y Estado de México con 197 cada uno.
Atziry Baca, socióloga de la Universidad iberoamericana y activista, detalló a este diario que si bien existen avances en materia legislativa a favor de las mujeres, aún hace falta capacitar a los ministerios públicos de México con perspectiva de género y tipificar el feminicidio en el país.
La activista dijo que en México, en cuanto a la violencia contra la mujer aún se debe trabajar en la sensibilización de servidores públicos, ya que si el caso no se hace viral o mediático, no se registran avances.
“Lo vimos en el caso de Debanhi, en el de Yrma Lidia, en el de Ariadna, que tienen en común los tres, fue feminicidio y se hizo viral, por eso se actuó, aunque no de manera correcta, porque cuando se empezó a bajar la euforia mediática los casos se apagaron, a excepción del de Yrma Lydia, que su agresor se murió en la cárcel”, detalló.
Por su parte, Ana Yeli Pérez Garrido, asesora jurídica del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), destacó que los aciertos que ha tenido la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador es que, en términos normativos, se han regulado diferentes tipos de violencias cómo en tecnologías de la información y política. Además de que se ha reconocido la violencia vicaría.
Indicó que la reforma a la Ley General de Acceso a la Mujeres a una vida libre de violencia, que reconoce toda la experiencia en el tema del procedimiento de alerta, y que ha sido un mecanismo, ha permitido mayores avances.
Reconoció que antes no existían políticas públicas en las entidades señaladas con alerta de violencia contra las mujeres.
“Si revisáramos qué es lo que había antes de las alertas, en todas esas entidades federativas de los municipios que están alertados en verdad…. Me tocó ver en el caso del Estado de México, por ejemplo, que no había nada o sea, nada, nada de política pública en materia de prevención y atención a la violencia”, expuso.
Aunque reconoció que en cuanto a los retos, hace falta una política de Estado.
“Hace falta una verdadera política de Estado que busque erradicar, por lo menos, porque sabemos que erradicar la discriminación nos va a llevar y mucho tiempo, pero no es posible que en un Estado de derecho se asesine a 11 mujeres todos los días, eso no ocurre en ningún otro país que se dice democrático”, indicó.
LEG