La Maldita Vecindad es toda una institución musical que, a lo largo de 37 años ha sabido sortear desde la prohibición del rock, pasando por la censura y los estigmas sociales, para ser el estandarte de los movimientos sociales en América Latina mientras que el reggaeton solo es un género banal con mensajes que alientan el consumismo y el individualismo, la violencia hacia la mujer.
TE PUEDE INTERESAR: La Maldita Vecindad presente este domingo en Rock al Parque
Mientras la banda se encontraba emocionada por viajar a Colombia, Roco aseguraba que la humanidad se encuentra en un renacimiento al que ellos aportan la medicina de la música y la cultura que necesitan en estas sociedades profundamente enfermas de desconexión, de consumismo, de enajenación, de depresión.
“Es un hecho que somos sociedades tan enfermas porque la cultura siempre se ha visto como algo superfluo, que está de más pero cuando es todo lo contrario. Esta visión de renacimiento de la cultura es lo que sigue con Maldita, estamos con mucha música nueva, con la certeza de que esta visión cultural que hemos manejado desde nuestros inicios, de la cultura del barrio, de lo popular, de la comunidad, de entender nuestro pasado, seguir recordando lo que verdaderamente somos como mexicanos, como latinoamericanos porque toda la historia que nos han contado es falsa, distorsionada”, dijo a 24 HORAS, Roco, vocalista original de La Maldita Vecindad antes de viajar a Bogotá, Colombia para su presentación en el festival Rock Al Parque.
Y al hablar de los nuevos géneros musicales, dijo que entre el rock y el reggaeton hay una gran diferencia. “El segundo surgió popularmente pero la industria la uso de una forma muy grande hasta lo que estamos viendo ahorita.
“En cambio, géneros como el rock latinoamericano que está profundamente relacionado en toda latinoamérica con los movimientos de derechos humanos, civiles, contra las dictaduras, intervenciones militares, saqueos transnacionales, contra todos estos momentos tan fuertes que hemos vivido en todo Latinoamérica.
“El rock mexicano no solamente tiene un papel muy importante en la cultura popular en México y el mundo pues es una música que refleja muy profundamente, como en el caso de la Maldita Vecindad los valores de la cultura mexicana.
“Analizando nuestra discografía podrían darse una idea de la historia social desde que empezamos, así que por eso veo una gran diferencia con el reggaeton que es una fórmula comercial que empezó como música popular pero es lo que difunde y quiere esta industria hecha en serie totalmente banal, inclusive con mensajes que alientan el consumismo y el individualismo, la violencia hacia la mujer; es una música que a la sociedad no le interesa, sino más bien a los que hacen mucho dinero con este tipo de productos, así que esa es la gran diferencia.
“En los próximos años vamos a ver también cómo las músicas que ahora consideramos subterráneas van a tener el valor y reconocimiento social a diferencia de esos experimentos o productos comerciales que en todo el mundo están difundidos con todos los recursos y en todos los canales”, añadió.
REAFIRMACIÓN DE LOS VALORES
Desde el principio, a La Maldita Vecindad le tocó vivir el momento en el que el rock estaba prohibido, censurado, estigmatizado y casi casi satanizado. “Nuestra música dentro del rock en los años 70 tampoco cuadraba muy bien, porque no era como el que hacían los estadounidenses o los ingleses, estábamos haciendo nuestra propia versión con toda la fuerza del punk, pero con toda nuestra música mexicana, con presencia del rock y el funk con lo que seguimos en la conquista de nuevos públicos”, sostiene.
El colombiano es un festival gratuito que une a bandas de la región, lo que asegura es una de las pocas iniciativas que deberían replicarse en toda América Latina.
“Hemos logrado ver todo el crecimiento de este gran proyecto cultural que es una voz de los jóvenes, una voz distinta que nos permite ver nuestras sociedades desde un punto de vista diferente que cubre esa gran necesidad de poder tener acceso gratuito a esta música y visión cultural.
“Cuando empezamos, había una prohibición el la Ciudad de México de conciertos masivos, ahí fue cuando con otros amigos músicos y colectivos de estudiantes comenzamos a hacer conciertos en apoyo a las comunidades indígenas de Chiapas 1994, en las Islas de Ciudad Universitaria en apoyo al movimiento zapatista y también a la necesidad de que no hubiera ese tipo de censura hacia el rock”, añadió.
La Maldita Vecindad en el año 2000 se atrevió, junto con un grupo de estudiantes en “tomar” el Zócalo capitalino para brindar un concierto gratuito en apoyo a las comunidades indígenas, sin apoyo del gobierno, donde reunieron a más de 60 mil personas, cosa que replicaron y a partir de ahí la Secretaría de Cultura se apropió de la idea.
“Por eso estamos conscientes de la gran necesidad de eso y lo hemos estado haciendo desde que empezamos en México; ahí recordamos esos tiempos en los que estaba todo prohibido y cuando a base de organización logramos generar esos espacios de cultura para todos. Así que reafirmar el Zócalo, ese vórtice de identidad espiritual, para nosotros fue increíble y de hecho invitamos a hermanos seris a compartir sus tradiciones que eran necesarias para esta época de tanta enfermedad”, recuerda en intérprete.
El año que está por concluir ha sido un año con muchas satisfacciones para Roco, Pato y Aldo pues han encabezado grandes festivales de la escena nacional e iberoamericana como lo son el: Vive Latino, Tecate Coordenada, el mencionado Rock Al Parque; además de demostrar su gran convocatoria para el Concierto en el Zócalo de la Ciudad de México y su show temático Día de Muertos en la Vecindad logrando en ambos llenos totales.
Además de haber estrenado música con su más reciente sencillo Música Guerrera en colaboración con la banda queretana Leones Negros y Atletas Campesinos; La Maldita Vecindad cerrará el año con dos presentaciones más, una el 9 de diciembre en Tuxtla Gutiérrez con su otro ensamble fiestero y bullanguero de la Vecindad Santanera; además el 16 de diciembre en la Arena Monterrey con otras grandes bandas como El Gran Silencio, Genitallica y otras bandas regiomontanas.
LEG