La destitución de Pedro Castillo de la presidencia del Perú fue un “golpe blando” de las élites de aquel país.
Así lo calificó el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) al referirse a la remoción de Castillo Terrones del Ejecutivo peruano al mediodía de este martes.
Cuestionado sobre la situación, López Obrador indicó que si bien se ceñirá al principio de no intervención de la política exterior mexicana, lo ocurrido ayer:
“Son golpes blandos, ya no es la intervención militar, es con el control de los medios ir socavando autoridades legal y legítimamente constituidas”.
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#LaMañanera "Son golpes blandos, ya no es la intervención militar, es con el control de los medios ir socavando autoridades legal y legítimamente constituidas": @lopezobrador_ sobre los hechos en Perú.https://t.co/MDnJgGDcsF pic.twitter.com/Rys8PpGIwO
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A su vez lamentó los hechos ocurridos durante el mediodía de este martes y pidió que se respeten los derechos humanos y se garantice la seguridad de la familia de Castillo Terrones.
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Y, al ser cuestionado sobre un posible “golpe blando” en México, el titular del Ejecutivo descartó que haya uno en puerta o que se llegue a presentar ya que la Oposición:
“No han podido ni podrán porque el pueblo está muy avispado, es uno de los más politizados del mundo. Ya a este pueblo no se le engaña”.
#LaMañanera @lopezobrador_ descartó que en México haya un golpe blando en contra del gobierno "no han podido ni podrán porque el pueblo está muy avispado, es uno de los más politizados del mundo. Ya a este pueblo no se le engaña".https://t.co/MDnJgGDcsF pic.twitter.com/a1i6obT5Pr
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Al mediodía de este martes decretó la disolución del Congreso y un “Estado de excepción” debido a que los legisladores votarían su destitución; momentos después el Legislativo lo removió del cargo y nombró a su sucesora, Boluarte.
Tras el cambio de titular del Ejecutivo de Perú, países como Estados Unidos y España, o la Organización de Estados Americanos reconocieron a Dina Boluarte.