Inflacion alimentos
Foto: Freepik / Al interior de la inflación, el componente subyacente adquiere importancia ya que ayuda a determinar la trayectoria de los precios en el mediano y largo plazo  

Después de dos años de mantener una trayectoria alcista, durante diciembre el componente subyacente de la inflación, integrado por mercancías y servicios, se desaceleró a 8.35% desde el 8.51% de noviembre.

Al interior de la inflación, el componente subyacente adquiere importancia ya que ayuda a determinar la trayectoria de los precios en el mediano y largo plazo, aunado a que es el rubro en el que tiene incidencia las decisiones de política monetaria de Banxico.

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El banco central ha subido su tasa de interés de referencia desde junio de 2021 para contrarrestar los efectos del Covid en los precios, y a partir de diciembre de ese año elevó la intensidad de sus incrementos.

“La disminución de la inflación subyacente en diciembre debe ser vista con cautela, pues fue resultado de un efecto de alta base de comparación del nivel de precios en diciembre del 2021 y de una moderación de las presiones inflacionarias del componente de mercancías, principalmente las no alimenticias”, indicó Banco Base en un reporte.

La ama de casa Virginia Elizalde comparte que “se vive un estrés a diario por temor a que no me alcance para los gastos (del hogar)”, desde lo más básico que es la alimentación, hasta los servicios complementarios para que sus dos hijas acudan a la escuela.

A pesar de dar una primera señal de tregua, analistas consideran que persisten presiones.

Marcos Arias Novelo, analista económico en Grupo Financiero Monex, expuso en un reporte que aunque se espera que el componente subyacente mejore para el primer trimestre de 2023, hay amenazas que provienen del dinamismo del consumo y el sostenido aumento en los salarios en los últimos años.

“Si revisamos (el incremento al salario mínimo) de manera aislada, no es significativo que en 2023 sea un alza de 20%, pero ya en el acumulado el incremento es muchísimo mayor, cerca del 70% que hemos tenido en esta administración, y si bien es algo positivo en términos de política social, igualdad y justicia laboral, no podemos dejar de lado que el hecho que puede tener como efecto colateral el presionar ciertos tipo de precios”, explicó.

Víctor Ceja, economista en jefe de Valmex, también identificó las mejoras laborales como un factor que pudiera presionar.

“No tiene un impacto tan inmediato, pero sí puede provocar mayor inflación en 2023 (…), se amplió el número de vacaciones en México, y se estima que las empresas que se dedican a esto, va a aumentar el costo de la nómina en términos generales”, expuso.

Sin embargo, al igual que el consenso, espera que los niveles desciendan en el transcurso del año. Sus estimaciones apuntan a que el componente subyacente descienda a 8.27% para enero.

Al cierre de 2022, la inflación general se ubicó en 7.82% a tasa anual, su mayor nivel para un cierre de año desde 2000, cuando se situó en 8.96%, según datos del Inegi.

Después de dos moderaciones a tasa anual, durante el último mes del año la inflación general anual registró un ligero repunte, desde el 7.80% observado en noviembre.

Y aunque el consenso de analistas estima que durante 2023 la inflación general y subyacente se desacelerarán, el proceso será lento, ubicándose en 5.02% y 5%, respectivamente al cierre del año, de acuerdo con la más reciente encuesta de expectativas de Citibanamex.

LEG