El grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC) en la Cámara de Diputados solicitó medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que suspenda la construcción del Tren Maya y que el Gobierno federal repare el daño ocasionado hasta el momento al medio ambiente y a las comunidades indígenas que habitan en su ruta.
La construcción, argumentaron, incumple los amparos promovidos por las comunidades que habitan en su ruta y de las asociaciones ambientalistas que buscan impedir que continúe la destrucción por las obras.
A través de un comunicado, la bancada naranja puntualizó que pese a las distintas órdenes de jueces federales de suspender la obra, las autoridades federales han desobedecido y continúan con la construcción “ecocida e ilegal”.
No solamente incumplen la garantía del derecho a un medio ambiente sano y de acceso a la justicia, aseveraron, sino que también la Convención Americana sobre Derechos Humanos en materia de derechos económicos, sociales y culturales.
De no frenar esta obra inmediatamente y resarcir su daño, advirtieron, el ecocidio será irreparable, pues se continuará atentando contra las 21 áreas naturales protegidas en los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, las especies en peligro de extinción, los ríos subterráneos y hasta los vestigios históricos de la de la región.
LDAV