El arte del español Okuda San Miguel es catalogado por los expertos como onírico inclinado hacia el estilo surrealista pop, mismo que está plasmado en la exhibición Metamorfósis que extendió su estadía en el Frontón México hasta el 19 de marzo, gracias a la gran aceptación que ha tenido por parte del público.
Pero la experiencia inmersiva creada por este artista español con la colaboración de creadores mexicanos, en Ciudad de México también enamora al paladar gracias a un menú especial creado por el chef Agustín Muñoz y que puede ser degustado en el restaurante Zesta Punta ubicado en el tercer piso del Frontón México.
Los sabores y colores hacen de este un menú sin igual en el que el mismo Okuda San Miguel fue parte fundamental ya que ambos creativos buscaron y encontraron la manera de crear deliciosos sabores ideales para completar la experiencia inmersiva de Metamorfosis.
“Estos platillos son un homenaje, una colaboración en conjunto con el artista donde él participó más que haciendo el plato probándolo y al mismo tiempo dando su aprobación en términos de colores más que los sabores. Pero lo que le presentamos a continuación Okuda llenó su ojo, su paladar, quedó muy satisfecho tanto sus colaboradores con lo que se realizó en el menú”, dijo en entrevista con 24 HORAS, el chef Agustín Muñoz.
Entre las creaciones culinarias que son parte del menú especial que puede ser degustado hasta este 19 de marzo están: Sinfonía de jitomates heirloom infusionado con aceite de oliva y vaina de vainilla acompañado de gazpacho y queso manchego; Acuarela de betabeles con salmón gravlax acompañado de jitomate cherry y mayonesa de colores; Robalo con arcoiris de papa acompañado de chucrut; y trilogía de bizcocho y mousse acompañado de sorbete de mango, todos ellos inspirados en la obra del artista santanderino.
“Si quisiéramos darle algún tipo de origen a este menú, sería irreal, más bien es una buena aplicación de técnicas enfocándonos en los colores y lo que queremos resaltar es que vaya en conjunto y armonía con la exposición.
“Por ejemplo, tenemos una trilogía de panacotas de guayaba, mango y mamey, uno de los platillos más solicitados, sabores muy mexicanos con la que estamos haciendo una mezcla de técnicas y de sabores, al mismo tiempo de colores porque tienen una forma geométrica muy definida y cada una de ellas tiene su propio color, además las resaltamos añadiéndoles unas galletas con los colores que también ocupa el artista para que vaya muy de la mano con lo que ambos buscamos”, añadió Agustín.
Una de las apuestas gastronómicas que debió enfrentar el pupilo del reconocido chef Guy Santoro fue el no utilizar colorante vegetal y lograr que cada platillo fuera lo más natural posible gracias a cada ingrediente, cuyo origen es netamente mexicano.
Incluso, la blancura de los platos en los que son servidas estas exquisiteces es básica en lo que a la presentación se refiere.
“Este es un menú que saca a los chefs de su zona de confort y al mismo tiempo lo reta, es un menú alegre, colorido, simpático hasta en los sabores, porque puede que te guste cuando lo veas pero también te tienen que gustar cuando lo pruebas. Aún estamos analizando el que si algunos platillos llegan a tener gran demanda quizá se quede como sugerencia de nuestra carta”, finalizó el chef del restaurante Zesta Punta.
LEG