Foto: Archivo | Esta Ley publicada en el Diario Oficial de la Federación el 12 de abril de 1917, consideraba a algunas publicaciones como “clandestinas”, impidiendo su circulación  

Por ser obsoleta, el Senado de la República abrogó la Ley sobre delitos de imprenta, toda vez que ya no tenía “cabida en el orden jurídico porque restringe injustificadamente el ejercicio de libertades fundamentales para el Estado de Derecho”, refirió la presidenta de la Comisión de Justicia del Senado .

Esta Ley publicada en el Diario Oficial de la Federación el 12 de abril de 1917, consideraba a algunas publicaciones como “clandestinas”, impidiendo su circulación, y la criminalización de los editores de libros, folletos, anuncios, tarjetas u hojas sueltas, el regente de la imprenta u oficina que hizo la publicación, el propietario de dicha oficina, los operarios de imprentas, sostenedores, repartidores o papeleros.

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Esta ley fue promulgada por Venustiano Carranza en su calidad de primer jefe del Ejército Constitucionalista y encargado del Poder Ejecutivo de los Estados Unidos Mexicanos y también establecía como delito a la moral, “toda manifestación o expresión maliciosa hecha verbalmente o por señales en presencia de una o más personas, o por medio de manuscrito, o de la imprenta, del dibujo, litografía, fotografía o de cualquier otra manera que expuesta o circulando en público, o transmitida por correo, telégrafo, teléfono, radiotelegrafía o por mensajes, o de cualquier otro modo, exponga a una persona al odio, desprecio o ridículo, o pueda causarle demérito o en su reputación o en sus intereses”.

Además toda manifestación o expresión maliciosa hecha en los términos y por cualquiera de los medios indicados en la fracción anterior, contra la memoria de un difunto con el propósito o intención de lastimar el honor o la pública estimación de los herederos o descendientes de aquél, que aún vivieren.

Todo informe, reportazgo o relación de las audiencias de los jurados o tribunales, en asuntos civiles o penales, cuando refieran hechos falsos o se alteren los verdaderos con el propósito de causar daño a alguna persona, o se hagan, con el mismo objeto, apreciaciones que no estén ameritadas racionalmente por los hechos, siendo éstos verdaderos, entre otros.

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Ricardo Monreal, coordinador de Morena, aseveró que la abrogación de la Ley sobre Delitos de Imprenta recobra relevancia, en virtud de eliminar toda contradicción o retroceso en el avance progresivo referente a diversos derechos y libertades, como la de expresión e imprenta, entre otras.

Al respecto, Ricardo Monreal, líder de los senadores de Morena, dijo que la abrogación de la Ley sobre Delitos de Imprenta recobra relevancia, en virtud de eliminar toda contradicción o retroceso en el avance progresivo referente a diversos derechos y libertades, como la de expresión e imprenta, entre otras.

LDAV