Los cuatro consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) y el secretario ejecutivo se despidieron hoy de sus cargos, en una sesión en la que hubo lágrimas, risas, ataques, críticas y halagos.
Durante una maratónica sesión de más de 11 horas, en la recta final, los consejeros fueron calificarlos desde constructores de la democracia, hasta señalarles que, a partir del próximo 3 de abril, se irán al “basurero de la historia”.
En la llamada Herradura de la Democracia, el primero en despedirse fue el secretario ejecutivo, Edmundo Jacobo Molina, quien, al borde de las lágrimas, recordó que renunció a su puesto porque adquirió una sobreexposición política que hace inviable que siga en su labor.
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El todavía funcionario agradeció a su familia, quienes estaban presentes en el salón del Consejo General, por los años que antepuso la consolidación de la democracia.
Sin embargo, la fiesta se apagó cuando se presentó el Informe sobre la Memoria de Gestión Institucional y sus apartados 2014-2023, pues Eurípides Flores, representante de Morena, dijo que Lorenzo Córdova avaló el gasto de 11 millones de pesos para que se elaborara ese reporte de más de mil páginas.
El consejero presidente, quien presidió lo que sería su última sesión, no desmintió el costo de ese informe, pero, en su defensa, salió el PRD, cuyo representante señaló que era una cifra mínima, si se compara con lo desperdiciado por el Gobierno federal, de más de 300 mil millones de pesos, por cancelar el aeropuerto de Texcoco o, dijo, los más de 10 mil millones de presuntos desvíos en Segalmex.
La consejera del Poder Legislativo de Morena, Julieta Ramírez, despidió a Córdova al indicar que fueron años de “burlas al pueblo, de quitarse la máscara, de que no fue un árbitro, sino un jugador de la oposición; deseo que siga manteniendo esa sonrisa allá en el basurero de la historia”.
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Mientras que los restantes siete consejeros tomaron la palabra para halagar a Lorenzo Córdova, Adriana Favela, Ciro Murayama y José Roberto Ruiz, así como al secretario ejecutivo Edmundo Jacobo. Quienes saldrán el próximo lunes de la institución.
Por su parte, el representante del PRI dijo que, aunque algunos les dé gusto que esos consejeros ya no formen parte del INE, para otros es lamentable que funcionarios de ese tipo acaben un ciclo.
El representante del PT arrancó las risas de los presentes, pues señaló que el pueblo sacrificará o premiará a Lorenzo Córdova tras su salida del INE.
La consejera Claudia Zavala aseveró que Córdova fue sometido a diversas “violencias” desde el poder, por lo que lo calificó como un “líder” que supo defender la autonomía del INE.
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A su vez, la consejera saliente Adriana Favela, con la voz entrecortada y llorando, dijo que los que se van “llevan tatuado al INE en el corazón”.
Al tomar la palabra, el consejero Ciro Murayama primero mostró sobriedad y dijo que “nos les tembló la mano” para actuar contra quienes violaron las leyes electorales y recordó que eliminaron las candidaturas de Raúl Morón y Félix Salgado, y resolvieron varias quejas contra el presidente Andrés Manuel López Obrador; sin embargo, su voz se le quebró y lloró al despedirse de Lorenzo Córdova a quien calificó como “camarada y amigo” y le dijo que regresarán juntos a la UNAM.
Córdova fue el último en tomar la palabra para hacer un recuento de los desafíos que enfrentó durante su gestión, y solo al mencionar a su familia se le quebró la voz. “Larga vida al INE” fueron sus últimas palabras, tras 11 años como consejero, nueve de los cuales presidió al órgano electoral.