Como es la norma entre las personas de su edad, las integrantes del primer grupo del género “sierreño” exclusivamente femenino de la Generación Z se conocieron en línea e intercambiaron mensajes directos con la esperanza de hacer música.
Las tres jóvenes avanzaron rápido, formaron Conexión Divina y lograron llevar su marca única de música “regional” mexicana-estadounidense a Coachella, el principal festival de música realizado en el desierto del estado de California y conocido por exhibir algunos de los mejores conciertos del mundo.
“Es realmente asombroso estar aquí. Es un honor”, dijo Liz Trujillo, quien recientemente se graduó de la escuela secundaria y ahora es la cantante principal de la banda.
Según su opinión, el grupo le aporta una “perspectiva femenina” y un “toque juvenil” al estilo sierreño, subgénero de la denominada música regional norteña de México, que se apoya básicamente en diferentes guitarras.
El regional mexicano se está expandiendo en las plataformas de difusión en línea. Según un informe reciente de Spotify, la popularidad del regional mexicano en la aplicación creció 56% entre 2021 y 2022, a 5 mil 600 millones de transmisiones en todo el mundo y 66 millones de oyentes fuera de México.
El “sierreño” se ha convertido en el favorito de los artistas más jóvenes, desde Conexión Divina hasta artistas como el cantautor estadounidense de origen mexicano Danny Lux o la banda Yahritza y Su Esencia, también participantes en Coachella.
“Nuestra industria está muy dominada por hombres”, dijo Trujillo, junto a sus compañeras de banda Ashlee Valenzuela, de 23 años, y Sandra Calixto, después de su presentación.
“Estamos representando a latinos, mexicanos, (miembros de la comunidad) LGBTQ, estamos representando a nuestra generación, lo que es mucha responsabilidad. Pero nos estamos ocupando de eso”, finalizó Trujillo.
LEG