La justicia colombiana negó el pedido de un fiscal para cerrar la investigación contra el expresidente Álvaro Uribe por presunto soborno, un nuevo revés para el exmandatario en uno de los casos más sonados y politizados de los últimos años en el país.
“Contrario a lo aseverado por el fiscal, sí existen elementos probatorios, evidencia física e información legalmente obtenida que permite afirmar con probabilidad de verdad que la conducta delictiva de soborno sí ocurrió, y que el doctor Uribe puede tener la condición de partícipe”, afirmó la jueza Laura Barrera durante una audiencia pública en Bogotá.
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Es la segunda vez que un tribunal rechaza una solicitud de la fiscalía para archivar la investigación contra Uribe por presuntamente sobornar y manipular testigos alrededor de su supuesta participación en grupos armados de extrema derecha.
La decisión allana el camino para que Uribe, quien gobernó entre 2002 y 2010 con una política de mano dura contra las guerrillas izquierdistas tan aplaudida como criticada, se convierta en el primer expresidente colombiano en ser enjuiciado.
“Al igual que ocurrió la vez pasada, lo que hoy está diciendo la juez es que con estos argumentos, con estas pruebas, el caso no se puede precluir”, explicó a la AFP el abogado penalista Francisco Bernate.
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Pero la fiscalía aún puede preparar una nueva solicitud para cerrar la investigación o apelar la decisión de Barrera ante otro juzgado.
Si finalmente un tribunal superior acoge el dictamen de la jueza, Uribe deberá ir a juicio y eventualmente podría ser condenado a prisión por dos delitos relacionados (soborno y fraude procesal), que en Colombia son castigados con unos ocho años de cárcel.