Las sobresalientes actuaciones de los dos sudamericanos en cuartos de Roland Garros: la brasileña Beatriz
Haddad Maia y el argentino Tomy Etcheverry fueron algo de lo más destacado de la jornada de ayer.
Haddad parece no tener techo en el Roland Garros más soleado y caluroso que se recuerda. La tenista de 27 años volvió a sacarse una vida extra y remontó para convertirse en la primera brasileña en llegar a las semifinales de un Grand Slam desde Maria Esther Bueno en el Abierto de Estados Unidos de 1968.
Si en la ronda anterior levantó un set y medio en contra con la española Sara Sorribes en el tercer ‘maratón’ femenino más largo en la historia de Roland Garros (3 horas y 51 minutos), esta vez remontó ante la tunecina Ons Jabeur (7ª), por 3-6, 7-6 (7/5) y 6-1.
‘Es una bestia’
“Estoy convencida de que esta victoria alentará a otras generaciones de mujeres”, aseguró desde Brasil Andrea Haddad, hermana de ‘Bia’.
“Es una bestia, y le deseo realmente lo mejor. Tengo la impresión de que mi historia y la suya se parecen un poco, y estoy muy feliz por ella y por Brasil“, afirmó Ons Jabeur.
“Estoy muy feliz. No fue fácil pisar la Philippe Chatrier por primera vez y jugar contra una jugadora tan competitiva como Jabeur”, admitió la propia Haddad.
El listón sube en 24 horas, el jueves ante Swiatek, que al contrario que Haddad llega sin ningún desgaste, tras pasearse también ante la estadounidense Coco Gauff (6ª), 6-4 y 6-2.
“Es joven y ya ha ganado dos veces aquí (2020 y 2022). Intentaré disfrutarlo y jugar cada punto, dejarlo todo en la pista. No tengo nada que perder, intentaré ir a por ello”, declaró Haddad.
Más tarde pisó por primera vez la central Etcheverry, el gran tapado del cuadro masculino. A la quinta fue la vencida y cayó el pegador de 24 años, pero vendió cara su piel, ante un ‘renacido’ Zverev, que se rindió a la calidad de su rival.
‘Puede estar en el Top-10’
“Está haciendo un tenis increíble. Me recuerda mucho a (Juan Martín) Del Potro, la manera en la que juega, cómo golpea con la derecha. Es muy joven y si continúa jugando así, puede estar en el Top-10, puede ganar grandes torneos, lo ha probado esta semana”, dijo Zverev sobre su rival cuando tomó el micrófono en la pista. Se había impuesto por 6-4, 3-6, 6-3 y 6-4.
Con su triunfo, el espigado jugador alemán (1,98 metros) regresará a la penúltima ronda, la misma en la que tenía contra las cuerdas a Rafael Nadal el año pasado, hasta que una grave lesión en su tobillo derecho le obligó a abandonar la pista en silla de ruedas. No ha vuelto al primer plano hasta esta quincena parisina.
Etcheverry jugó de tú a tú con uno de los grandes nombres del circuito en los últimos años. Le faltó algo de regularidad para tener verdaderas opciones.
“Es mi primer año en el circuito grande. Tengo que agarrar todavía más experiencia, encarar de diferente manera los momentos importantes”, dijo ‘Tomy’.
Zverev jugará el viernes por un puesto en la final con el noruego Casper Ruud (4º), que batió al danés Holger Rune (6º); 6-1, 6-2, 3-6 y 6-3, en la última ‘Night Session’ de la presente edición de Roland Garros.
En la otra final se citarán la leyenda Novak Djokovic (3º) y el número 1 mundial Carlos Alcaraz.
Haddad Maia se gana desafiar a Swiatek, Etcheverry honra a Del Potro
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