Elizabeth Gilbert, escritora del libro de ventas multimillonarias Comer, rezar, amar llevado a la pantalla grande con la actriz Julia Roberts, dijo ayer que suspendió el lanzamiento previsto de su nueva novela luego de críticas recibidas por estar ambientada en Rusia, actualmente en conflicto con Ucrania.
La decisión ilustra las dificultades que autores, celebridades, deportistas y artistas enfrentan al tratar de manejar las consecuencias de la muy criticada invasión rusa de Ucrania, que Moscú lanzó el 24 de febrero de 2022.
Gilbert anunció la semana pasada que The Snow Forest sería publicada a comienzos del próximo año, pero una avalancha de críticas la obligaron a dar marcha atrás sin establecer una nueva fecha de lanzamiento.
“Recibí una enorme cantidad de respuestas y reacciones de mis lectores ucranianos que expresaron su rabia, su pesar, su decepción y dolor por haber elegido lanzar justo ahora un libro que está ambientado en Rusia”, dijo en un video divulgado en su cuenta de Instagram.
“Escuché estos mensajes y leí estos mensajes, y los respeto. En consecuencia, he cambiado de decisión y estoy retirando el libro del calendario de publicación”, indicó.
“No es el momento correcto para publicar este libro. Y no quiero añadir más dolor a personas que sufrieron y continúan sufriendo daño grave y extremo”, consideró.
La novela está ambientada en la Rusia soviética de los años 1930 y sigue la historia de una familia que decide rebelarse ante el gobierno autoritario.
A pesar de estar distante de la situación actual, lectores cuestionaron de forma unánime la temática en el portal Goodreads.
“Mientras los ucranianos mueren por el terrorismo ruso, escritores famosos escriben libros sobre ellos e idealizan a estos bastardos”, escribió una de los cientos de personas que dejaron reseñas con apenas una estrella.
“¿Escribes sobre Rusia e idealizas a este país que está cometiendo un genocidio y un ecocidio en Ucrania? ¡Qué vergüenza! ¡Estoy decepcionado de ti!”, escribió otro lector.
La Ópera Metropolitana de Nueva York ya había marcado distancia el año pasado de la estrella rusa Anna Netrebko por su apoyo previo al presidente Vladimir Putin.
Atletas rusos y bielorusos fueron prohibidos de participar en varios eventos deportivos bajo sus respectivas banderas.
LEG