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Foto: Gabriela Esquivel / Esteban señaló que poder llevar a su hijo al trabajo después de recogerlo del colegio le quitó un peso de encima, pues no muchas empresas tienen esa flexibilidad  

Cuidar y educar solo a un hijo puede ser todo un desafío, pues la falta de tiempo, el desgaste físico y emocional así como los prejuicios vuelven esta labor aún más difícil, sin embargo, el amor por los hijos da las fuerzas para salir adelante.

La historia de Esteban, nombre ficticio para proteger su identidad, se remonta a cuando la madre de su hijo quedó embarazada en el 2009, momento en el que ella ya padecía una enfermedad crónica que volvía la gestación un proceso complicado; sin embargo, a poco más de un año de haber superado la etapa del parto, ella decidió irse de casa.

Esteban narró a 24 HORAS que un miércoles mientras se encontraba trabajando recibió la llamada de la madre del pequeño en la que le pedía regresar a la casa y al llegar al domicilio ella le informó que se marchaba.

“Lo más difícil fue esa noche, sí, porque no sabía yo qué hacer”, rememoró Esteban al recordar lo difícil que han sido sus 13 años como padre soltero.

“Era un bebé de aproximadamente un año y tres meses, lo primero que se me ocurrió fue agarrar al niño esa misma tarde y llevarlo a casa de mis papás para saber qué era lo que yo podía hacer porque tenía la parte del trabajo”, contó agregando que su madre le ofreció cuidar al pequeño hasta que entrara a la guardería, pues ella padecía una enfermedad incapacitante, tras lo cual volvieron a vivir solos padre e hijo.

“Todo ese tiempo prácticamente yo me dediqué al niño, era mi vida cotidiana ir a dejar al niño a la guardería y a la escuela y después de ahí irme a la oficina, a la hora de la comida ir por el niño (…) y ahí sinceramente mi jefe de aquel entonces mis respetos, yo le agradezco muchísimo porque me ayudó a que llevara al niño a la oficina, es muy difícil que una empresa permita eso”, explicó.

Por otra parte, este padre reconoció que a pesar de mantener una buena relación con madres de familia de las escuelas de su hijo, sí padeció momentos complejos.

“Hicieron un grupo para las mamás de los niños en donde yo estaba, pero además hacían otro grupo donde yo no estaba, un poco la cuestión de género”, así como el asistir a los festivales del 10 de mayo, pues aunque muchas madres eran cordiales, sí había otras que generaban prácticamente un rechazo, señaló.

Con el tiempo la madre del pequeño pidió a Esteban establecer un contacto con su hijo, a lo cual no tuvo problema en acceder, pues no le guarda ningún resentimiento.

FRASE:

“En la pandemia fueron dos años de los que estuvimos encerrados juntos, él en su clase y yo en el trabajo (…) esos dos años fueron tranquilos porque estábamos los dos”
Esteban
Padre soltero

‘Verlos felices es mi motor’

Por: Marco Fragoso

Padres de familia coinciden que no es fácil ser el sostén de la familia y al mismo tiempo llevar la estafeta de la educación con los hijos.

Un ejemplo es José Hernández de 29 años, padre de Valentina y Daniel, quien comentó a 24 HORAS que por las mañanas debe preparar sus insumos que utiliza el fin de semana, ya que se dedica a organizar eventos sociales.

Para José lo más importante es la convivencia y la educación de sus pequeños, por lo que se encarga de ir a dejar y recoger a sus hijos al colegio. Sin embargo, a la tarea de los hijos y el trabajo, asegura que se suma la de cocinar.

“Ver a mis hijos felices es mi motor para ir a trabajar día con día y el hecho de que no les falte su comida y sus necesidades básicas y uno que otro lujo, es el mejor pago que puedo tener”, destacó.

Por otra parte, Christian Mejía es un padre soltero que está a cargo de Ivana, una pequeña de dos años, y señaló que el mayor reto será a futuro, cuando vea las repercusiones que tendrá el no haber acompañado a su pequeña en su crecimiento, porque trabaja.

Indicó que su rutina de lunes a viernes es ir a dejar a su hija con su abuela, de ahí se va a trabajar nueve horas y regresa por su pequeña a las nueve de la noche.

“Ojalá la educación que le da mi madre sea la adecuada para que en un futuro no me diga que no estuve con ella por irme a trabajar, pero espero que entienda que preferí alimentarla para que no le llegue a faltar nada”, subrayó.

 

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