Gipsy, una hembra de elefante africano, llegó este lunes al Zoológico de San Juan de Aragón para acompañar a la elefanta Ely; ambas compartirán el mismo hábitat, un espacio 10 veces mayor a lo establecido según estándares internacionales.
“Recibimos a una hembra de elefante africano, Gipsy, procedente del Centro de Conservación Zoofari, ubicado en el estado de Morelos. Con el apoyo de Zoofari, Africam Safari, la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (Azcarm) y otras instituciones estamos viendo por la salud y bienestar de los ejemplares de fauna silvestre que habitan en los zoológicos y Centros de Conservación de México”, refirió Fernando Gual Sill, director general de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México.
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Gual Sill subrayó que la ampliación del hábitat de la elefanta Ely, así como considerar la posibilidad de trasladar a otro elefante africano con características similares, surgió en respuesta a un dictamen sobre la situación de la elefanta africana Ely por parte de expertos en elefantes, en bienestar animal, en medicina y en manejo de la fauna silvestre, convocado en su momento por la Azcarm.
Cabe recordar que el elefante africano es una especie que se encuentra en la lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).
“Todo esto lo hemos hecho, primero que nada, pensando en los elefantes, no sólo en Gipsy y Ely, sino en todos los elefantes que hay en el país y en todos los elefantes que hay bajo cuidado de profesionales en vida silvestre, es muy importante conservar a esta especie porque está desapareciendo a pasos acelerados en vida silvestre y puede ser el último bastión para conservarla”, indicó Marcos Oteiza Gajón, director general del Centro de Conservación Zoofari.
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Ambas elefantas compartirán el hábitat en el que reside Ely, el cual fue ampliado recientemente y ahora cuenta con una superficie 10 veces el tamaño estipulado por estándares internacionales para un elefante. Además, el lugar cuenta una charca de agua donde podrán de bañarse y refrescarse, casas de noche para descansar cuando lo decidan, charcas de lodo donde podrán llenarse de tierra, así como troncos, termiteros, dispensadores de alimento, entre otros elementos que forman parte del programa de enriquecimiento ambiental del Zoológico de San Juan de Aragón.
EAM