Ardelio Vargas Fosado renunció a la subsecretaría de Desarrollo Político de la Secretaría de Gobernación de Puebla, a menos de una semana de ser designado y tras el veto del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En un mensaje a través de sus redes sociales, el mandatario estatal reconoció al exfuncionario como un “poblano comprometido con su entorno y su tiempo”, esto pese a los señalamientos que hizo el jefe del Ejecutivo federal por su pasado represor y vínculos con Genaro García Luna.
Agregó que hasta la fecha, Vargas Fosado no ha sido sentenciado o señalado por algún delito; sin embargo, dijo que tras la información difundida en medios de comunicación, hizo pública su decisión de abandonar el Gobierno de Puebla.
El titular del Ejecutivo estatal explicó que su relevo y otros ajustes en el gabinete de estado serán anunciados en breve.
La salida ocurre horas después de que el presidente López Obrador recordara el vínculo entre el exfuncionario y García Luna, preso en Estados Unidos por nexos con el crimen organizado.
En su conferencia Mañanera de este lunes, el presidente dio a conocer que alertó al gobernador del estado sobre los antecedentes del exfuncionario recientemente nombrado subsecretario de Desarrollo Político en la Segob de Puebla.
Más tarde, Vargas Fosado escribiría un mensaje en redes sociales, donde agradeció al gobernador por invitarlo a participar en su administración.
Mencionó que si dejó la subsecretaría fue para darle gobernabilidad a la entidad.
También acusó a la prensa de difundir información tergiversada y con mentiras, pues, dijo, en su trayectoria nunca ha existido una condena o mancha de escándalo.
LEG