La fuga de petróleo en Campeche duró 18 días y el volumen máximo que pudo haber vertido al mar fue de mil 368 barriles, aseveró el director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero.
En conferencia de prensa, el funcionario aseguró que la fisura en el ducto era de apenas siete centímetros de largo y un milímetro de ancho.
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“Para que tengan una idea de la fractura del ducto pusimos un ejemplo, un bolígrafo que mide 14 centímetros y pueden observar que la fractura es de siete centímetros de largo y el ancho es de un milímetro. El tubo trabaja a baja presión pero tiene suficiente para que en una abertura tan pequeña haya fuga.
“Tomando en cuenta que el área erosionada del ducto fue de siete centímetros por un milímetro y considerando el ducto operando a plenitud, los cálculos indican que solo se pudo haber derramado un volumen máximo de mil 368 barriles en los 18 días, a razón de 76 barriles diarios“, dijo el director de Pemex.
Aseveró que el evento no solamente no se ocultó sino que se le dio parte a las autoridades de inmediato.
Romero presentó una línea de tiempo en la que explicó que el día 5 de julio se empezaron a efectuar los preparativos para la reparación de la fuga con un barco.
Para el 7 de Julio suspendieron las actividades porque ese día se produjo el incendio en una plataforma y todos los recursos cercanos se movilizaron para ayudar a controlar el fuego.
“Entonces se suspende estas actividades de la reparación de esta fuga y se reanuda la reparación provisional el día 10 de julio y el 18 de julio se concluye la reparación provisional”, dijo.
Agregó que entre el 18 y el 19 de este mismo mes la Secretaría de Marina realizó una inspección aérea e identifica una mancha de hidrocarburo, llamadas iridiscencia de aproximadamente 5.2 millas náuticas discontinuas, es decir, que en algunos lugares eran más anchas que en otros.
El 19 de julio debido a que no observaron una hermeticidad al 100% en la reparación realizan un paro en dos pozos y finalmente el 22 de julio dan por concluida la reparación luego de colocar una grapa con el diámetro exacto del ducto y lo cual selló por completo la fuga.
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Al referirse a la información dada a conocer por la UNAM que detectó un mancha de hidrocarburos de más de 400 kilómetros cuadrados, dijo que esto era producto de un fenómeno natural llamada chapopoteras que se pueden dar en la tierra o que se pueden dar en el mar.
“En el caso de estas chapopoteras, la mayor que nosotros tenemos está ubicada está en el campo Cantarell, muy cerca del campo Balam y se origina en una fractura que hay en el suelo marino del orden de un kilómetro y medio y por distintos lugares de esos mil 500 metros se dan estas emisiones naturales.
“¿Desde cuándo? Desde muchos años. Podemos pensar que son miles o millones de años. El consejo nacional de investigación de Estados Unidos señala que las chapopoteras o las emanaciones naturales representan a nivel mundial el 46% de la aportación todos los años de hidrocarburos al ambiente oceánico”, aseguró el director de Pemex.
EAM