Un masivo incendio fuera de control arrasa la reserva natural de Mojave, en el sur de California, y ha desatado “remolinos de fuego” que amenazan esta región rica en biodiversidad, informaron las autoridades.
El incendio York comenzó el viernes y ha consumido unas 31 mil hectáreas en esta área desértica, con una de las mayores concentraciones de los emblemáticos árboles de Josué.
Las llamas de hasta seis metros de altura cruzaron el límite estatal y alcanzaron el vecino Nevada. Unos 250 bomberos trabajan en la región, pero no han podido contener el infierno.
La reserva nacional Mojave es hogar para especies de tortugas, zorros y linces, entre otros, además de los árboles de Josué, conocidos por sus cortas ramas, recubiertas en los extremos por pequeñas hojas que asemejan pompones.
Especialistas han manifestado su preocupación por el impacto que el cambio climático pueda causar en la especie altamente vulnerable a las llamas.
En 2020, el incendio Dome quemó en la misma reserva nacional Mojave 1.3 millones de ejemplares, equivalente al 13% de su población.
El federal Departamento para el manejo de tierras (Mojave National Preserve) precisó que los vientos en la región impactaron el comportamiento de las llamas.
“Estas condiciones climáticas son muy peligrosas para los bomberos que enfrentan el incendio”, agregó la agencia federal. “Tienen el potencial de esparcir brasas a grandes distancias y pueden iniciar nuevos incendios”, agregó.
Los bomberos constaron además “remolinos de fuego”, producto de las altas temperaturas y los vientos. “Aunque observarlos puede resultar fascinante, se trata de un fenómeno natural muy peligroso”, dijo la agencia.
“Los remolinos de fuego adicionales pueden cambiar de dirección repentinamente, lo que los hace impredecibles y difíciles de anticipar“. El incendio está bajo investigación, dijeron las autoridades.
Varias carreteras aledañas están cerradas, pero no han sido emitidas órdenes de evacuación en los condados afectados. Las autoridades advirtieron que el humo alcanzó el sur del también vecino estado de Utah.
El suroeste de Estados Unidos atraviesa una dura ola de calor que ha llevado al termómetro a más de 43 °C en Phoenix, Arizona, durante 31 días consecutivos y ha dejado a Las Vegas, en Nevada, con récords de temperatura.