Familiares de Carlos Aranda, desaparecido en Canadá hace 27 días, acudieron a la Cámara de Diputados para pedir que sea la propia canciller Alicia Bárcena quien conduzca el diálogo y las acciones conjuntas con las autoridades de aquel país para localizar al joven oaxaqueño.
Recibidos por el diputado Alejandro Robles (Morena) solicitaron en conferencia de prensa que se eleve el grado de atención en este caso y llegue directamente a oídos del Presidente de la República.
Confían en que una vez que el mandatario tenga la información sobre el caso de su familiar, gire instrucciones para que sea la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores quien asuma el liderazgo en el caso ante las autoridades canadienses.
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“Lo anterior tiene como principal intención que, tras una coordinación bilateral de alto nivel, las instancias pertinentes canadienses, a su vez, exhorten y comprometan, hasta el límite de sus facultades, a los miembros de la Policía Montada del destacamento de Osoyoos encargados del caso”, indicó la familia de Carlos en un pliego petitorio.
Enfatizaron que esperan que al oficial Neal Kalnin, quien es el principal responsable de la pesquisa, amplíe las líneas de investigación y ésta se extienda más allá de sólo entorno a una desaparición.
Al contar con ninguna pista de paradero del joven, los familiares consideraron que existen altas probabilidades de que haya sido víctima de algún delito grave.
A esta conclusión llegaron luego de múltiples recorridos en campo, emprendidos tanto por el padre y un sobrino, en lo individual, así como de forma masiva por cuadrillas de voluntarios y binomios caninos profesionales, los cuales no arrojaron el menor indicio de que Carlos Tomás hubiera sufrido el peor de los desenlaces en los alrededores de la zona en la que se le vio por última vez.
Reclamaron que quienes tienen a cargo la investigación indaguen a profundidad no sólo lo que pudo haber pasado luego de vérsele por última vez en las instalaciones del Spirit Ridge Resort la madrugada del viernes 7 de julio, sino que se busque hasta el más mínimo detalle de los hechos ocurridos previo a ese momento.
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Específicamente, apuntaron, lo que motivó a Carlos a salir huyendo en busca de ayuda del lugar donde convivía con tres personas más la noche del jueves 6 de julio.
Esto, continuaron, es crucial y como acción mínima se deben obtener los testimonios, en persona y asentados por escrito, de los referidos sujetos, cosa que, hasta el momento no ha realizado el oficial Kalnin.
Señalaron en sus peticiones que tienen la esperanza de que la secretaria Bárcena o el propio presidente López Obrador establezcan diálogo directo con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, para atender el caso.