La sumisión química o “canasteo”, lo cual es una alteración de las bebidas hacia una persona sin su conocimiento, resulta una línea importante de investigación y penalización por parte de las autoridades de la Ciudad de México para combatir la inseguridad, robos, secuestros exprés y hasta muertes que ocurren en los bares, restaurantes y antros.
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Este delito que se comete tanto en lugares públicos como privados está penalizado en la Ley General de Salud, artículo 264, de tres a siete años de prisión, en caso de lesiones,pero de ocurrir la muerte la condena subiría a más años.
Los efectos del canasteo son las alteraciones variables del nivel de conciencia, alerta y control voluntario de los actos de la víctima, así como amnesia anterógrada o la pérdida de la capacidad de formar nuevas memorias más allá de cierto momento del tiempo, explicaron autoridades de seguridad y legisladores a 24 HORAS.
La forma de realizar esta práctica es poner mediante un gotero o una jeringa, así como arrojar en un vaso una píldora, como en el básquetbol, para alterar la sustancia y provocar la pérdida de la conciencia de una persona.
El presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y la Justicia de la Ciudad de México, Salvador Guerrero, informó que en los últimos cuatro años y ocho meses existen 58 denuncias por estos hechos.El mayor número de denuncias son en las alcaldías Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo,
“En los bares ocurre uno de cada cinco; en privado, en la casa de un amigo, en la casa del familiar, en la casa de la víctima ocurre el 36%; es decir el, canasteo ocurre más en los espacios privados, en casas de conocidos donde ocurre el 30%, no quiere decir dónde ocurre”, detalló.
De acuerdo a las estadísticas, abundó, el 72% de las víctimas de esta práctica son mujeres, mientras que en rango de edades el 52% corresponde a personas de 21 a 35 años y el 40% a personas de 36 a 50 años.
El diputado Jorge Gaviño, integrante de la Comisión de Administración de Justicia, dijo que los últimos acontecimientos ocurridos en Polanco, obligan a intensificar la aplicación de la ley de una manera más férrea.
El legislador periodista aseveró que además de los operativos se debe ser más estrictos en la aplicación de la ley, denuncias anónimas y ciudadanas de los lugares en donde se sepa que ocurren.
Organizaciones de vecinos en la alcaldía Miguel Hidalgo denunciaron que en los antros de Polanco muchos clientes después de consumir pierden el conocimiento y cuando salen no reciben ayuda.
LEG