En los últimos días, había trascendido en las noticias mundiales que el gigante del mercado inmobiliario chino, Evergrande, se había declarado en bancarrota, esto debido a la enorme deuda que tiene la empresa, causando terror dentro del sector, ya que esto significaría un duro golpe para diversas empresas.
Tras un par de días de varias especulaciones, la propia empresa ha salido a desmentir esta información, señalando que no han entrado en un proceso para declararse en bancarrota y que simplemente han solicitado a un tribunal estadounidense un proceso correspondiente para la reestructuración de su deuda.
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Durante el año 2021, Evergrande anunció pérdidas netas atribuidas de 476,035 millones de yuanes, un equivalente a 66,409 millones de dólares, mientras que durante todo el 2022 registró pérdidas equivalentes a 105,914 millones de yuanes (14,775 millones de dólares), además de tener congelada su cotización en la Bolsa de Valores de Hong Kong desde el pasado 21 de marzo de 2022.
En una detallada explicación respecto a su situación económica actual y sus planes para poder salir a flote, Evergrande señaló que se encuentra bajo la jurisdicción en un tribunal de Nueva York y este está encargado de vigilar la reestructuración de su deuda externa en Hong Kong y las Islas Vírgenes Británicas.
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Mediante una solicitud sustentada bajo el capítulo 15 del código de bancarrota estadounidense, estarían buscando suspender de manera temporal los pagos de sus deudas internacionales en los Estados Unidos, para así sacar a flote las deudas que tienen con sus acreedores.
Recordemos que la situación de esta empresa empeoró luego de que en Pekín se anunció el pasado mes de agosto de 2020 la restricción de acceso a financiación bancaria a las promotoras, esto debido al nivel de deuda que habían obtenido algunas empresas.
MC