Recibirá fuego de varios lados.
Desde enfrente, bajo el comando de Palacio Nacional, una gran campaña en contra multiplicada en redes sociales y los medios bajo control del Gobierno.
De grupos de la llamada sociedad civil contrarios a su ideología, entre ella su respeto al homosexualismo, el lesbianismo y al aborto en los términos de las constituciones federal y estatales.
Y desde dentro porque no se han roto las resistencias del panismo tradicional ni de los núcleos priistas y perredistas tan contrarios y lejanos al PAN.
En ese mar de oposiciones deberá navegar Xóchitl Gálvez para ser candidata presidencial contra el régimen antes de enfrentar la terrible campaña de Estado en ciernes.
Porque lo visto hasta ahora es apenas un asomo de cuanto le espera una vez ungida, si gana al aparato tricolor y a Beatriz Paredes, por parte del Frente Amplio por México.
Adentro será, es previsible, una lucha más intensa y fratricida a la esperada por el poder federal ante la corcholata escogida por el dedazo presidencial en septiembre para la alianza oficial.
PAN vs. PRI
El Frente registra una lucha inesperada y destructiva.
Uno:
Nunca se previó, o no se anunció, una competencia entre partidos para ganar la abanderada de oposición y hoy quedan dos personalidades frente a frente, la panista Xóchitl Gálvez y la priista Beatriz Paredes.
Dos:
Entra a contienda una estructura partidista a favor de Beatriz Paredes contra una personalidad, Xóchitl Gálvez, sin organización política propia y rechazo de grupos tradicionales panistas presuntamente aliados.
Reto aparte pero decisivo es penetrar en las capas populares del país, afines por voluntad propia o manipulación de un régimen dado a repartir el erario con fines electorales.
Xóchitl ha sido fenómeno en las últimas semanas, pero necesitará ampliar alianzas, renovar su discurso, asesorarse con especialistas en todos los temas y esgrimir proyectos estructurados en lugar de respuestas ingeniosas pero espontáneas.
DIGNIDAD
La primera decisión la tomó Santiago Creel.
Anoche, al momento de redactar este texto, él declinó sus aspiraciones a favor de Xóchitl Gálvez y prometió luchar a su lado por cristalizar ideas y proyectos para un México distinto al actual.
Por la mañana le dijeron 15 exgobernadores panistas:
“Los números que todos conocemos indican que Xóchitl Gálvez tiene la mayoría de las preferencias… Es momento de cerrar filas y asegurar el triunfo no sólo en el Frente Amplio, sino en las elecciones constitucionales…”.
“…Con la amistad y confianza que nos dan las batallas que juntos hemos dado, es que te pedimos ahora que declines a favor de Xóchitl Gálvez tu noble y legítima aspiración…”.
Al redactar esta nota Creel anunció su “total apoyo” a la senadora y el escenario está montado: Xóchitl contra Beatriz, humillada en dos elecciones sucesivas -2006 y 2012- en el entonces Distrito Federal y hoy Ciudad de México.
Creel atendió, sirva el listado, el llamado de exgobernadores como Marco Antonio Adame, Vicente Fox, Francisco Ramírez Acuña, Fernando Canales y para qué citar a los once restantes.
Pero falta, como dijimos arriba, si el PAN de Marko Cortés da todo por la candidata más competitiva para enfrentar al aparato de Estado en junio de 2024.
LEG