Los Estados miembros de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) acordaron ayer en Johannesburgo permitir nuevos socios comerciales de potencias emergentes, aunque sin comunicar por el momento una lista de posibles nuevos integrantes.
“Nos pusimos de acuerdo sobre la cuestión de la expansión. Hemos adoptado un documento que define las líneas directrices, los principios y los procesos de examen de los países que deseen convertirse en miembros de los BRICS”, declaró el ministro sudafricano de Relaciones Exteriores, Naledi Pandor, en la radio pública.
El ministro no precisó qué países se incorporarán en los próximos años al club, aunque dijo que se conocerán más “detalles” antes del final de la cumbre, el jueves.
Unas cuarenta naciones — incluidos Argentina, Cuba, Nigeria o Irán — solicitaron la adhesión o mostraron su deseo de incorporarse al bloque creado en 2009, que representa casi un cuarto del PIB y un 42% de la población mundial. El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró que “el interés de varios países por unirse al grupo es el reconocimiento de su creciente relevancia”.
China, peso pesado económico del grupo, reiteró su posición a favor de la expansión.
“Los BRICS deben obrar en favor del multilateralismo y no crear pequeños bloques. Debemos integrar a otros países en la familia de los BRICS”, afirmó por su parte el presidente chino, Xi Jinping.
Lo mismo que Moscú que, bajo sanciones por su invasión de Ucrania, necesita aliados diplomáticos.
India, tras guardar silencio el primer día de la cumbre, el martes, se acabó pronunciando a favor de la apertura para tener nuevos socios comerciales en el pequeño grupo que son hasta ahora.
LEG